—Give me all your love and don't stop
My love's waiting when you reach the top—Aaall night loooonnggg. —Sigue Niall.
— Come into my bedroom honey -Continuo cantando, el sonrie mientras saltea las verduras en el sartén. —What I got will make you spend you money... Ay yo no quiero eso.
El ríe y apaga la cocina, se aserca a mi y besa mi frente. La música continua sonando. —Te ves preciosa hoy.
—¿No te viste? -El me sonríe.- Dios, hoy los ojos se te ven más hermosos que nunca ¿Eres real acaso?
—Hm ¿Quieres que te demuestre que si?
Me besa y presiona su agarre en mi cintura, pero mi teléfono comienza a sonar y nos interrumpe. Gruñe bajo, me besa por última vez y vuelve a el sartén, mientras tanto tomo mi teléfono y abro la llamada, es mamá.
—Hola, má.
—¡Tengo noticias increíbles! -Dice con emoción, casi gritando.
La coloco en altavoz y dejo el teléfono frente a mi en el mesón mientras saco dos platos de la alacena. —Cuentame.
—¡Img models te quiere como modelo Plus size!
Miro a Niall, ambos nos miramos confundidos. —¿Que?
—Te quieren, me acaba de llamar Patrick Whitesell. Le dije que estas en Londres y quieres que vayas a charlar con ellos.
—No quiero.
—¿Que? -Dice Niall.
Niego con la cabeza, el me mira con total confusión.
—¡¿Acaso estas loca?! -Pregunta mi madre desde el teléfono. -¡Ellos tienen a las modelos más icónicas de la época!
—No quiero modelar más, estoy bien como estoy. -Replico.
—¡¿Pero por que?! -Pregunta ella con enojo.
—¡Es una porquería! Estoy bien con mi peso, mis medidas. Solo era imagen ¡Mi felicidad laboral no esta ahi! No voy a volver, para el único lugar que modelare va a ser para mi marca y este tema se cerró.
—¡Bien! -Y cuelga la llamada.
Me encojo de hombros y sigo con lo que estaba haciendo, dejo los platos sobre el mesón y abro la cajonera para sacar los cubiertos.
Pero, Niall me quita los cubiertos de las manos y los deja sobre los platos.—Deja eso... -Murmura, para después abrazarme y estampar mi boca con un beso, sonrio sobre sus labios. -Todo lo que hagas va a ser increíble.
Esta vez lo beso yo y lo abrazo por la cintura, sintiéndome la mujer más afortunada del mundo.
(...)
Creo que estoy muriendo, es serio todo esto ¡No puedo respirar después de entrenar con Niall!
Estoy tirada en una colchoneta, mirando el cielo, con el pecho subiendo y bajando de tratar de recuperar la respiración. El solo esta sudado, tomando sol y agua mientras descansa.
—Nunca más...
El ríe cuando me escucha y se aserca, se acuesta a mi lado en el suelo. —Obviamente a mi me personalisaron la rutina, tu necesitas una para ti.
—Si, claro.
El ríe otra vez, con ganas. —Bueno, voy a anotar cuanto tiempo ejercitamos... -Se estira y toma su teléfono de arriba de la reposerá. —Solamente hicimos cuarenta minutos, que poco aguant...
—¿Que sucede? -Giro mi cabeza para mirarlo. El mira su teléfono con enojo y desplaza el dedo por la pantalla, rapido.
—¡¿Que mierda es esto?! -Pregunta casi gritandome y me muestra la pantalla del teléfono, hago sombra sobre el teléfono con mi mano para poder ver. Veo una foto mía con el idiota de anoche, es algo comprometedora, entiendo su reacción ya que yo tendría la misma. El hombre me toma por la cintura, estamos muy serca, pero mis manos están lejos de el.
—Yo no lo estoy tocando.
—¿Que sucedió? Y más importante aún... ¿Por que no me contaste nada? Digo, había un idiota ostigandote.
Me levanto y me siento, agarro una botella de agua y bebo un poco para hidratarme. Me giro hacia el mientras tapo la botella, el me mira con las cejas levantadas esperando a que hable. —Por que estaba ebria y no pasó nada más que eso. Supe controlar la situación y quería decírtelo en un momento donde pudiera pensar mejor mis palabras y no sólo decirte "Un idiota lo intento conmigo" ¿Entiendes? -Suspiro.-Ademas ni siquiera sabía que ibas a buscarme, pensé que me subía un Uber y si te hubiera contado de lo que acababa de pasar ¿Que hubieras hecho?
—Entrado e intentado dejarle en claro mi posición como tu pareja.
—Jum... Eso no hubiera estado bien ¿Entiendes mi punto?
El gruñe un poco y se acuesta en el suelo tapándose los ojos con el brazo. —Esta bien... Dejémoslo así.
Me río y dejo la botella a un lado, me aserco más a el y me siento sobre su pelvis. —¿Te enojaste? ¿De verdad?
El quita su brazo de la cara y sacude la cabeza negándolo. —Yo se que te sigo teniendo aquí y te creo... -Responde, sus manos tocan mis muslos y sube hasta mi trasero para dejar sus manos ahí.
—No te quedan bien los celos.
Ambos reímos. El sol me esta quemando la espalda, hace mucho calor hoy.
Mañana tenemos que irnos, ya extrañamos a los niños y nuestra casa. La semana ya paso y hay que volver a la rutina.—A ti se te ven hermosos.
Sonrio y tomó su cara entre mis manos, el arruga un poco la nariz haciendo una mueca. —Todo me queda bien.