XLIX.

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Sophia's POV,

2 días después,
Escala - 7:15am

El día del regreso de Christian ha llegado y no puedo evitar sentirme nerviosa. Siento nervios por entregarle el anillo y también por su reacción al ver que le he ignorado por dos días consecutivos.

Ayer estábamos supuestos a cumplir un año juntos. Un año de altas y bajas, con más bajas que altas si soy honesta. Pero al final es un año que logramos enfrentar como pareja sin importar las adversidades que hemos tenido. Sin embargo, el pensamiento que me come la mente es que quizás ya no haya nada que celebrar.

Sé que estuve muy mal al ignorar a Christian en estos días, también estuve mal al bloquearlo de todas partes, pero realmente me dolió mucho ver que había olvidado qué era lo que celebrábamos ayer... o lo que estábamos supuestos a celebrar.

Me levanto con pesadez de la cama y abro las cortinas para que la luz de la mañana invada la habitación. Miro el reloj y me debato entre ir o no la oficina. No hay reuniones pautadas para hoy y me gustaría terminar los bocetos que quiero mostrarle a Christian para la remodelación del Cuarto de Juegos. Quizás si cambio el ambiente y la decoración se anime a dejarlo.

Creo que puedo quedarme sin problema alguno. Según Elliot, Christian llegaría directamente a la cena del cumpleaños -y compromiso sorpresa- de Kate. Lo que significa que su vuelo no llega hasta dentro de casi siete u ocho horas.

A paso lento me dirijo a la ducha y tras graduar el agua como me gusta, me desvisto. Tomo un mechón de mi pelo y a pesar de que huele bien decido lavarlo.

"Christian, sé que te ignoré..."

No, no. No puedo empezar así.

"Te merecías que te ignorara así que..."

Tampoco puedo empezar así.

Me coloco debajo de la regadera y cierro los ojos mientras disfruto de cómo el agua acaricia todo mi cuerpo.

"Sé que estás enfadado, pero yo también lo estoy y me gustaría..."

Un escalofrío me recorre toda la espina dorsal y me sacudo ligeramente.

Mierda. Otra vez he dejado la puerta del baño abierta. No pienso salir a cerrarla, ni mucho menos pienso salir a apagar el aire acondicionado. Gradúo el agua más caliente tratando de aliviar el frío que siento y me volteo para que me caiga agua en la nuca.

"Christian, hay que hablar, quie..."

Un brazo me rodea la cintura y me alza. Todo pasa tan rápido, un segundo me encuentro de bajo de la regadera y al otro estoy acorralada entre la pared y... Christian.

El frío de la pared me hace arquearme por lo que me presiono contra Christian. No puedo creer que esté aquí. No le esperaba. Aún no sé qué debo decirle.

La mirada de Christian es una seria, muy seria, pero su erección me deja saber que no está tan enfadado como parece... o eso creo. Está frente a mi y va vestido. Tiene una camisa de botones azul, pantalones grises y hasta zapatos lleva. Tras mirar su vestimenta vuelvo a mirarle a los ojos y no logro decifrar nada, sigue serio.

Una parte de mi está emocionada de verle, quiero besarlo, pedirle que me haga suya y que se case conmigo. Pero otra parte de mi sigue dolida. Abro mi boca para tratar de decirle algo, pero no me deja. Me interrumpe con un beso.

No puedo permanecer quieta así que termino devolviéndole el beso. Un beso fuerte, que demuestra pasión y cuánto nos extrañamos. Su lengua está explorado mi cavidad bucal y la mía hace lo mismo. Nos separamos por falta de aire y Christian gruñe.

La mejor sumisa de Christian GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora