One-shots, imaginas, pequeños momentos de ensueño al lado del rumano mas querido de marvel.
Las historias serán sobre Sebastian o cualquiera de los personajes que ha dado vida.
Espero que les guste el contenido que les traigo, dejen sus comentario...
—¿Tenemos que trabajar en esta casa? —suspira pesadamente Steve mientras cargaba algunas herramientas de jardín —No entiendo porque estás desperdiciando así tu día de descanso, Bucky.
Bucky sonríe abriendo la puerta del jardín de los Stark — No te quejes, no estabas haciendo nada, aparte tendrás dinero extra, Steve.
Ambos mejores amigos entran al lugar, el jardín de la familia Stark poco a poco estaba dejando su gracia veraniega, adelantándose a la estación de otoño, aunque las temperaturas aún estuvieran agradables.
El nuevo cabecilla de los Barnes había creado bastantes escusas para ir cada semana a la casa de la joven Genevieve y ella también había logrado salir de su hogar para encontrarse con él en la noche, todo con ayuda de su hermano Howard.
Genevieve sale a su jardín al ver que era la hora de la llegada de Bucky, sonríe ampliamente al encontrarse al ojiazul.
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Steve mira a la chica pelirroja saliendo de su hogar con un vestido veraniego de flores, después mira la sonrisa torpe de su amigo —Retiro lo dicho, sé qué haces aquí.
La celta se acerca a ambos hombres a paso tranquilo, aunque su interior estaba completamente revolucionado por la presencia de Bucky.
—Hola, Bucky y hola... —le sonríe al rubio.
—Steve.
La ojiverde sonrió ampliamente —Mucho gusto en finalmente conocerte, Bucky habla muchas cosas de ti.
Steve asiente, aunque se encontraba sorprendido al escuchar eso —Me gustaría poder decir lo mismo, pero temo que ni tu nombre se.
Bucky mira a su amigo con ganas de querer matarlo, Genevieve ríe por la honestidad de Steve y asiente —Genevieve Stark —se presenta extendiendo su mano al hombre más bajo que ella, el amigo de Barnes la toma aún más sorprendido por tanta amabilidad de la chica.
—Bueno, creo que ya es hora de trabajar —comenta Bucky separando las manos de aquellos dos, Genevieve suelta una risita al notar los celos del ojiazul —Veo que hay una parte verde, aun —dice caminando hacia el área mencionada del jardín, es seguido por Genevieve y Steve.
—Si, algunos florecen en otoño.
Las miradas que Genevieve y Bucky se lanzaban cada dos por tres no pasaban desapercibidas para el escuálido rubio, él sonreía al ver la cara de idiota que su mejor amigo tenía en ese momento, pero también temía que algún familiar de la pelirroja los descubriera.
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