Especial Halloween pt.2

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Capítulo dedicado a; @sophiaddapa & 

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Despertó, exactamente, a las tres y cinco de la mañana, terminaba el día treinta y uno y empezaba el primero, la noche donde iban a jugar lo que nunca creyó posible. Su carpa, hecha en las afueras de su casa, térmica y con mucho calor dentro, tenía a cinco chicas más durmiendo abrazadas, una tierna hilera que le hacía cierta gracia. Bostezó y fregó su ojo, intentando apartar el sueño y las malas sensaciones; el miedo y la inseguridad, lejos de ella. Esta noche no quería nada de ello.

Removió un poco el cuerpo a su lado, SoYeon estaba abrazada a su cintura, con una linda castaña abrazada a ella de manera posesiva. El gruñido de SoYeon fue una pequeña alerta de que se detuviera, pero no lo iba a hacer.

–Yeonie –llamó, la pelinegra volvió a removerse algo molesta, joder ¡Era tarde y hace menos de una hora había cerrado los ojos! – Yeonie son las doce. Es hora –susurró de nuevo, SuJin quiso reír enternecida cuando SoYeon abrió solo un ojo para verla, frunciendo su ceño en el proceso.

–De que hablas.

–Vamos, el juego –SoYeon pareció pensar unos momentos sobre qué decía su amiga, a los segundos entendiéndola.

–Oh, ¿Y qué hay de las demás? Aun duermen –sentándose, acariciando la cabellera castaña de su "dueña", bostezó.

–Para eso te necesito, tú me ayudarás –segura y con una sonrisa, se sentó sobre sus rodillas. Claro que necesitaba ayuda, algunas eran demasiado posesivas con sus horas de sueño y no estaba dispuesta a recibir un golpe.

–Está bien. –suspirando, la pelinegra asintió.

SoYeon movió lentamente el cuerpo junto a ella, recibiendo un agarre aún más fuerte en su cintura. De verdad, dormir con WooGi era algo que de verdad amaba, pero la castañita, pese a ser adorable a sus ojos, no dejaba nunca su cintura. A menos que– Yuqi –llamó, la castaña removiéndose– Vamos, bebé, despierta –llamó cantarina, riendo cuando una sonrisa en sus labios hizo aparición, sonrosándose y escondiéndose en su muslo.

–Eres molesta –removiendo su cara en su muslo, se sentó.

–Despierta un poco más, iré a ayudar a Susu –pese a que la castaña hizo una mueca, la pelinegra continuó yendo donde estaba su mejor amiga.

La encontró tratando de deshacerse del abrazo de Shuhua, riendo bajo cuando esta renegaba entre sueños con que no quería soltar la nube. Solo se encogió de hombros negándole cuando pidió ayuda con la mirada, despertando al resto de chicas que estaba aún en una pequeña nube de sueños.

Fue más fácil con las dos que quedaba, siendo solo ella quien las despertó, SuJin llevaba peleando más tiempo del que esperó con Shuhua, riendo y tratando de deshacer el agarre en su vientre. Lo lograron, después de mucho tiempo despertándolas, lo lograron.

Hoy era Halloween, y después de haber pasado gran parte de la noche en busca de dulces junto a YeonSeok, su primo, habían acabado en la carpa que sus padres les habían hecho en el jardín de su casa. Sus amigas habían pedido permiso para quedarse con ella en Seúl al menos una semana, semana que no iban a desperdiciar.

Esa noche, como lo habían planeado hace unas dos semanas atrás, iban a jugar al juego del que Yonghyunk les había hablado, poniendo en juego muchas cosas, pero ¿Qué más da? es solo un juego. Su compañero de clases y vecino les había leído una de las tantas historias de terror del que su nueva aplicación le daba conocimiento, eran divertidas, sí, y entre ellas había rituales entre líneas. Una tarde como cualquiera, su vecino había llegado emocionado pidiendo jugar a ello, y claro, SuJin no se negó, no creía en nada más que no fuera su tío MinSu.

Quédate conmigo | Mark Lee | Libro#2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora