Con un suspiro, tiró de su cuello hasta atrás, sonriéndole a quien estaba dándole un tierno baño de burbujas. La noche anterior había sido toda una locura; después de aquella primera ronda, habían tomado un baño juntos, acabando en una segunda ronda, continuaron en la sala, gozando de la poca luz y sus cuerpos, concluyendo la tercera de la noche. Y aquella mañana, la menor no podía con sus caderas, estas dolían como el mismo infierno, a penas y pudiendo caminar. Mark, como el buen novio que era, se había propuesto cuidar de ella como siempre hizo, llevándola entre sus brazos, cual novia recién casada, hasta la bañera, calentando agua y poniendo una bomba de aromatizante y color en la misma.
Su menor no podía estar más satisfecha, gozando de cómo su novio la consentía, le daba dulces y suaves masajes en su cabeza y fregaba con cuidado su cuerpo. La menor se dejó hacer, casi y durmiéndose en el proceso.
–Eres tan jodidamente tierna cuando estás cansada... –Mark había dejado recaer su barbilla en sus brazos al borde de la bañera, apreciando con total devoción a su menor, quien había bajado su mirada con una sonrisa tímida.
–Creo que ahora soy tierna en todo para ti –la menor jugó con el agua, moviendo las burbujas hasta su pecho, cubriendo su desnudez.
–Siempre lo has sido.
–Te bajó lo romántico, Romeo –la menor rió, lanzando un poco de agua a su novio, quien rió al mismo tiempo que limpiaba el agua. Estaba tan embobado...
–Es mejor que salgas ahora, recuerda que llamó Sae por lo de Félix –su novio se puso de pie, yendo a buscar una toalla a la pequeña repisa– Y creo que era urgente.
–Está bien.
La menor se puso de pie, alzando sus brazos en dirección a Mark, quien había evitado mirar su desnudez al completo, alzando su vista únicamente a su tierno rostro. Envolvió a la menor entre la blanca tela, subiéndola a sus brazos como lo había hecho para traerla al baño, subiéndola a la cama para poder secar con delicadeza cada parte de su cuerpo, desde sus piececitos hasta su cara; besando cada zona que podía, con dulzura.
Al acabar, abrió el closet de su menor, sacando algunas ropas que, a su parecer, estarían bien. La vistió como si fuera su hija, o alguna niña pequeña. La menor reía por la delicadeza que empleaba Mark, dedicándose a cuidar de ella. Humectó sus piernas antes de poner las medias hasta la rodilla, sus zapatos y atarle los cordones.
Se alejó, viendo lo hermosa que se veía. La sudadera color púrpura pastel que dejaba al descubierto el cuello de la blusa blanca, quedaba tan largo que ocultaba parte de la falda que le había puesto, viéndose jodidamente sexy y tierna con las medias hasta sus rodillas, junto a sus botines negros. Y no conforme con haberla vestido, secó también su cabellera, dándole masajes suaves en su cabeza. La menor cerraba sus ojos y dejaba que su novio hiciera con ella lo que quisiera, al final de cuentas, Mark era sumamente delicado con ella.
Una vez lista, con su cabello atado en una coleta, Mark sonrió satisfecho, tomando a su menor de sus glúteos para poder unir sus labios en un beso que la menor no dudó en seguir. Caricias lentas, suaves y sencillas, donde solo sus labios se movían al ritmo lento que impuso Mark, saboreando el bálsamo que él mismo había puesto hace menos de un minuto en los labios de su novia. De verdad, amaba ese sabor.
–Vamos, te llevaré a casa de Mariam y SaeHun, yo pasaré a hacer la compra del mes –comentó, tomando a la menor de su mano, sonriéndole cuando esta bostezó– Eres como un gato, te lo juro –la chica frunció su ceño, alzando una ceja después.
– ¿Un gato?
–Sí, haces así con tu nariz –hizo una demostración, moviendo su nariz de un lado a otro como su menor hacía cuando terminaba de bostezar, arrugando su nariz como cuando ella lo hacía al bostezar. Tan tierna– Y es todo el tiempo.
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Quédate conmigo | Mark Lee | Libro#2
Genç Kurgu-Segunda temporada "Amantes enmascarados". La vida de adultos parece ser complicada, comenzando juntos y con el apoyo mutuo de ambos. Pero ¿Será suficiente aquel amor como para soportar las tormentas que les esperan? - Contenido variado, desde las...