Cap. 80 - mi vida entera 1/2

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... desperté abrazando la almohada, normalmente despierto abraza de Villamil así que me saque de onda, me volteé a ver si del otro lado de la cama estaba Villamil y nada, me paré de un brinco de la cama y busqué en el baño pero no estaba.
Gritaba y gritaba su nombre pero nadie contestaba, me puse la playera que tenía ahí Villamil para salir del cuarto y seguir buscando en el resto del departamento.
Fui directo a la cocina y me llevé tremenda sorpresa...

"Buenos días mi preciosa
Perdóname por desaparecerme así de la nada sin avisarte pero esto es parte de la sorpresa que te mencioné ayer, tú solo relájate okey? Te preparé tu desayuno favorito, no me salió de lo mejor pero espero y lo disfrutes, en el proceso del día estarás descubriendo mas pistas para llegar a la gran sorpresa.
Te amo.
Atte: Villamil."

Estaba esa nota en la mesa a lado de un gran plato de chilaquiles verdes y un jugo de naranja, me senté y me dediqué a desayunar, realmente moría de ganas por saber que estaba pasando, necesitaba ver a Villamil que era lo principal de todo esto.

Minutos pasaron, termine mi desayuno y lavé mi plato, me fui directo de nuevo a la habitación para meterme a bañar.

Salí y me arreglé un poco, realmente no sabía que tenía que hacer, no tenía ni la menor idea de lo que estaba planeando Villamil, así que solo me puse unos jeans blancos con una blusa de una banda de rock para estar cómoda.

Me senté en la cama y revisaba una y otra vez mi Instagram, realmente me desesperaba no saber nada que entre a la decisión de llamarle a Villamil pero alguien antes me detuvo...

Sonó la puerta de mi casa y salí volando a ver quien era.

Mariana: mamá?.

Mamá: hija lindaaa cuánto tiempo sin verte - fue directo a mis brazos.

Mariana: qué gran sorpresa pero qué haces aquí?.

Mamá: tengo que avisar para poder ver a mi chiquita linda?.

Mariana: sabes que a eso no me refiero, estoy encantada que estés aquí.

Mamá: y que estabas haciendo? - entró a mi departamento.

Mariana: estaba a punto de llamarle a Villamil.

Mamá: NO - lo dijo gritando.

Mariana: qué?.

Mamá: aaammm de seguro está ocupado haciendo sus cosas de famoso y charara charara, mejor despeja tu mente que hoy vengo a relajarte el día.

Mariana: tú sabes algo?.

Mamá: algo de que? Yo no se nada, ahora ve por tus cosas qué hay un spa que nos espera.

Mariana: eres pésima mintiendo jajajaja pero bueno, voy por mi cartera y nos vamos.

Entre de nuevo a mi habitación para tomar mi bolso.
Salí del edificio junto con mi madre, al parecer ella tenía el día planeado ya que en el resto del viaje empezaba a describir nuestro día.

Mamá: y del spa iremos de compras como lo hacíamos cuando estabas chiquitas recuerdas? Uhhh como extraño esos días.

Mariana: listo llegamos.

Bajamos del coche y fuimos directo al spa, cada quien se fue a una habitación del lugar y nos propusimos a relajarnos durante un par de horas.

X persona del spa: terminamos por hoy, en una hora vuelvo mientras usted se viste - salió del lugar para yo poder cambiarme sin interrupciones, entre a un mini cuarto para poder ponerme mi ropa y al salir noté que en la cama donde estaba acostada había una sorpresa más...

"Espero que hayas disfrutado el spa mi bonita, poco a poco estás descubriendo tu sorpresa.
Por de mientras tome este pequeño detalle.

Atte: Villamil"

A lado de la carta estaba un gran ramo de mis flores favoritas.

Mi madre y yo salimos del lugar para dirigirnos a una plaza comercial e ir en busca de ropa nueva.

Mamá: muero por comprarme un vestido.

Mariana: esta tienda se ve cool, vamos? - mi mamá tomó de mi brazo y juntas entramos al lugar.

Horas y horas pasaban, ropa y más ropa salía de probadores hasta que al final las dos quedamos completas de bolsas.

Mamá: estoy súper cansadaaaa.

Mariana: yo igual, tanto probarme ropa es un fastidio.

Mamá: pero lo bueno de aquí es que salimos ganando - levantó las bolsas de las compras.

Mariana: vamos a mi casa?.

Mamá: te iba a pedir que me llevarás a mi casa, después de este agotado día quiero sólo dormir.

Mariana: estás segura?.

Mamá: si además no quiero interrumpir más en tu día.

Salimos del centro comercial para subirnos nuevamente al carro, el recorrido fue un karaoke al mil, pusimos música y nos alocamos demasiado mientras el tráfico no avanzaba.

Lleve a mi madre a su casa, de ahí me dirigí a la mía sin esperanza de nada, no tenía señal de villa ni de la sorpresa que me tenía, simplemente quiero un momento con mi novio.

Subí a mi edificio y abrí mi puerta, avente mis cosas al sillón incluyendo las bolsas de compras y antes de tirarme a la cama estaba un precioso vestido azul con un encaje fabuloso y a lado del vestido estaba la carta...

"Y las sorpresas aún no terminan princesa.
Arréglate y en una hora llegarán por ti okey? Usa ese lindo vestido que escogí especialmente para ti"....

Me arregle tal y como lo decía la carta, me puse el increíble vestido azul que me quedaba maravilloso, me ondulé el cabello y me puse un poco de maquillaje.
Justo a tiempo termine ya que alguien tocaba mi puerta.

Mariana: con que tú eres mi chofer?...

Quédate aquí - Villamil Donde viven las historias. Descúbrelo ahora