Sucumbiendo al instinto (Omegaverse/Bl/Erótica)

Comida en familia

Dilan estaba tenso. Y como no estarlo. Normalmente no sabía cómo reaccionar a un ambiente familiar y menos cuando esas personas no eran precisamente su familia. Nunca había hecho un viaje de aquel tipo, madre, padre y él. Lo más cercano fue hasta los 11 años con Louis.

La mano de Ryo acarició su muslo pero aun así no podía relajarse. Sus manos estaban húmedas de sudor y su espalda tiesa contra el cómodo asiento de la camioneta. La voz de la madre de Ryo resonaba en todo el vehículo.

-Nunca me imaginé que la esposa de nuestro hijo sería tan lindo. Mira ese pelo y esos ojos. Es precioso- se reía la mujer. A su lado su esposo sonreía con ella ajenos a la reacción de quién hablaban.

Dilan tragó en seco. Si hubiera sabido que estaría en aquella situación se lo hubiera pensado un poco más antes de acompañar a Ryo.

-Baby- sintió el aliento cálido del alfa en su oído- Relájate un poco. Solo están contentos de conocerte, pero te prometo que no muerden-

Dilan giró un poco su rostro casi sintiendo la respiración de Ryo en su mejilla.

-Dices eso porque son tus padres- habló también apenas en un susurro- Y tu mano está en mal lugar- la agarró casi llegando a la unión de la cadera y la tiró hacia un lado- Contrólate tú y tus hormonas calientes-

Ryo no pudo evitar sonreír provocativamente.

-Lo siento cariño pero estoy un poco emocionado antes de tiempo-

Dilan hizo una mueca.

-Muchas gracias pero no tengo la menor intención de follar con tus padres delante-

Bueno…Ryo tampoco así que no siguió provocándolo. El día sería largo conociendo a sus padres y era mejor no agotarlo de más y tentar su paciencia.

***

Dilan no sabía por qué pero no podía dejar de mirar a la madre de Ryo. Si, era una omega, hermosa, elegante, vestida con ropa casual pero elegante a la vez a pesar de estar en un restaurante en pleno parque de diversiones. La excusa era que en ese lugar se servía buena comida y había un excelente cine. Dilan no se quejaba, lo menos que se imaginó era que sería llevado a un lugar como ese y estaría en una cena relativamente familiar, se sentía cálido el ambiente.

Aun así no podía sacarse de la cabeza que había algo extraño con esa omega, pero no podía decir qué exactamente. Era demasiada feminidad o a la vez no. Sería acaso…

-Dilan- oyó la voz de Ryo llamándolo. Giró su rostro hacia el alfa- ¿Qué vas a pedir?- le tendió la carta.

Dilan reaccionó y la tomó leyéndola rápidamente. Había unos cuantos platillos apetecibles y otros que le llamaron la atención.

-Puedes escoger todo lo que quieras, va por mi cuenta- Sheldon le dijo ayudando a su esposa a escoger.

Dilan asintió levemente con la cabeza y mando a pedir tres que le gustaron bastantes. Los precios tampoco eran exagerados como los de los restaurants que su padre solía levarlo para algún negocio.

-Y bien- ahí iba de nuevo el interrogatorio. Dilan se puso tenso de antemano. Alex, la madre de Ryo lo enfocó con una sonrisa- ¿Se casarán en un futuro?-

Ryo que tomaba un sorbo de agua no pudo evitar escupirla y empezar a toser. Seldon le ofreció una servilleta. Dilan entendió de donde era el carácter directo de Ryo.

-Nosotros- el omega pudo jurar que estaba sudando frío.

-Era una broma- Alex se corrió un mechón de cabello hacia atrás- Mientras mi bebé esté feliz no me meto en sus relaciones. Además que el muy desgraciado casi no viene a vernos y se independizó cuando le dio la gana, me imagino que si se casa y tiene hijos voy a tener que patearle la puerta para que me deje verlos ¿verdad cariño?- le sonrió a Ryo como si todo su discurso hubiera sido de rosa.