Sucumbiendo al instinto (Omegaverse/Bl/Erótica)

Duerme conmigo/ Maraton 2

Dilan pudo jurar que sudó frío.

-¿Primera vez? Si claro, primera vez que casi me llegan al estómago- sonrió nervioso.

Pero el rostro de Ryo no mostraba ninguna gracia.

-¿Porque no me lo dijiste?-

-¿Qué parte de lo que dije no entendiste?-

-Respóndeme. Eras virgen ¿verdad?- presionó No soy estúpido y no es tan fácil engañarme Dilan. Y créeme que no necesito tu confirmación, tu cuerpo fue mi muy sincero-

Un sonrojo de vergüenza envolvió el rostro del menor.

-Maldito alfa- hizo el indicio de salir de su agarre pero los brazos de Ryo lo tiraron hacia atrás y su espalda término contra el pecho del alfa- Suéltame- hizo un puchero molesto y avergonzado por ser descubierto que Ryo encontró adorable.

-No te molestes- le mordió su oreja para después lamerla.

-Que hubiera cambiado que te hubiera dicho que era virgen- refunfuñó el omega.

-¿Y que parte no entendiste tú que no soy una bestia. Hubiera sido más gentil-

-Perfecto, y no me hubieras dado como si no hubiera un mañana. Eres un jodido animal-

-Pero a ti te encantó- Ryo se burló abrazándolo más contra él. Le gustaba la sensación del chico entre sus brazos. Se sentía muy suave y reconfortante.

Dilan se dejó envolver en las suaves feromonas que el alfa desprendía.

-Creo que puedo aguantar-

Dilan que había cerrado los ojos los abrió.

-¿A qué te refieres?-

-Cuantos meses van a ser. Esos en los que no podré tener sexo contigo-

En serio le preguntaba eso. Dilan se apretó el tabique. Este tipo solo pensaba en como revolverse con su cuerpo las 24 horas del día.

-¿Ryo, tantas ganas tienes de follarme?- no se lo podía creer-

-Si- el tono de su voz y su respuesta consisa hizo que el menor casi temblara.

Pero no cometería el error de muchos de preguntar por lo que sentía por él, fuera lujuria, cariño o hasta amor. Dilan no podía arriesgarse dado la situación de ellos.

Sabía que su relación o lo que fuera que tuvieran estaba destinada a terminar mal y hasta separarse para siempre una vez la verdad saliera a la luz, eso sí salía vivo antes de que Mark lo matara. Y no jugaba con eso. Sabía que su padre podía enterrarle un cuchillo en el estómago y dejar que se desangrara delante de el sin ningún remordimiento por hacerle eso a su hijo.

Ellos no eran pareja, no eran amantes, eran simplemente¿nuevos compañeros sexuales? Tal vez. Una definición más aceptable para lo que tenían. Aunque Dilan no estaba muy convencido si eso era lo que pensaba él o el alfa.

Pero tampoco podía decirle al alfa que no se acostaría de nuevo con él, en primera porque eso era una forma de tenerlo donde quería y de su lado. Era más fácil manipular a las personas cuando el sexo estaba de por medio. Y es segundo porque a quien engañaba. El sexo con Ryo, a pesar de todo lo bestial e intenso, le había encantado.

Si, era un asco de persona, era consciente de ello, pero había demasiado en juego y ya no podía echarse hacia atrás.

Ya después vería como podría arreglar los platos rotos. Ahora no era el momento. Muchas vidas y la felicidad de muchos pesaban sobre sus hombros, sobre todo la de esa persona que lo había traído al mundo.