Promesas vacías. Neji Hyūga×OC. ||TERMINADA||

004; El equipo cinco, Tetsurama entra

La academia había sido más dura de lo que creía, durante el segundo año ingresó un viejo amigo de la aldea de las aguas termales. Akiyama Daiki, del kekei genkkai de hielo, un chico de cabellos verdes y ojos amarillos que provocaba más de un suspiro y siempre un dolor de cabeza de para Neji.
Ino había cortado su relación con Sakura y creado un lazo con Tenten mientras que ella había creado un vínculo con Haruno, una situación un tanto problemática cómo solía llamarla Shikamaru.

Estaba feliz de que Sasuke siguiera vivo, pero nunca había vuelto a ser el mismo, al igual que Neji solo era un niño amargado, lleno de sed de venganza, de Uchiha lo comprendía, pero, Neji ¿por qué quiere venganza? Aún no lo comprendía.

Tomó asiento junto a Neji, cómo siempre lo hacía y a su vez, Daiki lo tomó a su lado. Soltó un suspiro, esperando que eso no le diera problemas y rezó a todos los dioses esperando no estar en el mismo equipo que él y la estrella de ése año.
Aunque esperaba estar junto al Hyūga, tal vez con Lee.
Iruka entró al aula con un tablero en mano y comenzó a nombrar los equipos, recargó su cabeza en la butaca esperando escuchar su nombre.

- Hyūga Neji. Rock Lee. -sintió la mano de su amigo rozar con la suya, dudó por un momento pero al final muy decidida entrelazó sus manos y ambos se apretaron con fuerza, esperando que el tercer integrante del equipo fuera ella- Y Tenten.

- ¡¿Qué?! -se puso de pie y estampó su mano libre en la butaca- ¿Por qué? Yo deberia estar en ése equipo.

- Los equipos están conformados para que haya un equilibrio, si te colocamos en el mismo equipo que Neji la vida de ambos correría peligro todo el tiempo. -respondió sereno.

- Oiga, ya sé que Neji es un prodigio y yo no soy la más hábil pero tampoco creo que eso significa que nuestra vida corra peligro.

- No es por eso Hika-chan. -Iruka miró las manos entrelazadas- Hay otra razón. Prosigo.

Ambos se sonrojaron al notar que aún seguían tomados de las manos, pero no sé soltaron, solo se limitaron a guardar silencio y volver a tomar asiento.

- Equipo cinco: Akiyama Daiki, Yamanaka Inohika. Fukui Hizoka.

Miró de reojo al Hyūga, que miraba de forma amenazadora a Daiki.

- Si algo le pasa, si se te ocurre ponerle un dedo encima a Inohika. -hizo una breve pausa y regresó la mirada al frente- Voy a matarte, Akiyama.

Soltó un suspiro y se encogió en su lugar, cómo si eso fuera a resolverle la vida, pero no era así, estaba segura que de ahora en adelante venían problemas.
Poco a poco los maestros de cada equipo comenzaron a aparecer dejando el salón vacío, solo faltaba su equipo y el de Neji.
Daiki platicaba una gran aventura que había tenido junto a sus padres cuando se mudaban a la hoja, Lee, Tenten y Hizoka lo escuchaban admirados por el poder que él y su familia poseían, mientras que ella y Neji jugaban "gato" en una hoja de papel.

— ¡Muy bien mocosos! —la puerta se abrió dejando ver a una bonita mujer de cabello castaño claro marcas rojas en las mejillas y ojos rojizos — ¡Yo soy la hermoadmirable sensei del equipo cinco! ¿Quiénes de ustedes lo son? —los tres integrantes levantaron la mano un poco intimidados por la actitud tan alegre de la mujer— Hecho, ¡vámonos! —dijo con emoción y salió del salón.

— Eso fue extraño. —susurró Neji— Suerte.

— Lo mismo digo. —sonrió mostrando todos sus dientes y se marchó junto a su equipo.