Promesas vacías. Neji Hyūga×OC. ||TERMINADA||

031; Sora, el Semijinchuriki

Ya habían pasado varios meses desde la partida de su padre y era el momento de comenzar su búsqueda para cumplir el sueño de Gakuto. Encontrar a la otra sobreviviente.
Bien sabía que no iba a ser nada fácil, solo contaba con la referencia de tener unos 28 años de edad, cabello azul -igual que la mitad del de ella- y kekei genkkai de cristal, pero ni eso era tan difícil como la pareja que le había permitido Tsunade para que no fuera sola: Yuè
Yue Kawashima tenía habilidades muy similares a las de Morino Ibiki, entonces si tenían que usar la fuerza para conseguir información sería diez veces más fácil.

Llevaban un par de semanas fuera, habían escuchado algo sobre une leyenda de una mujer de cristal que vivía entre las montañas y aunque buscaron sin cansancio no encontraron a nadie, además su tiempo de búsqueda había acabado, ambas estaban fastidiadas una de las otra y anhelaban volver a casa.

- ¿Cómo lo has llevado? -la peliroja llamó su atención- Daiki, ¿cómo lo has llevado?

- Lo extraño muchísimo. -confesó- Supongo que no es un secreto que tuve un pequeño desequilibrio después de eso, debo confesarte que está es mi segunda misión después de eso. ¿Y tú?

- También lo extraño muchísimo. -soltó un largo y pesado suspiro- Estuvimos tantos años juntos, que creí que mi vida sería a su lado. Que creceríamos juntos, nos casaríamos tal vez a los veinte y tendríamos dos hijos, un niño y una niña... Debo confesarte que estuve mucho tiempo enamorada de Neji-kun, pero cuando Daiki me declaró su amor descubrí que lo sentía por Neji era solo un capricho, y el verdadero amor de mi vida era Daiki..., no lo sé. Creo que sentí algo especial, una conexión mágica. No sé si él también lo sintió tanto como yo pero pasábamos tiempo juntos antes de que se marcharan y cuando tenía días libres tras convertirse en ANBU eran pasa mí. -ambas guardaron silencio por unos minutos- Para mí ha sido difícil, trato de buscar su risa en el viento cuándo sopla contra los cerezos, sus abrazos en los días cálidos y sus palabras de aliento en sus canciones favoritas pero nada me ha servido. Lo extraño mucho, pero supongo que tú debes de estarlo pasando peor. Se criaron como hermanos.

- La pasé bastante mal, pero no puedo volver a caer. Ya no. Él quería ayudar a mi padre con su sueño, ahora ambos no están y tengo que hacerlo. Tengo que cumplir la voluntad de mi padre y de Daiki-kun.

- ¿Sabes? Me ofrecí por si necesitabas ayuda, le dije a Tsunade-sama y ahora estamos aquí. Juntas.

- ¿Por qué lo hiciste? No soy de tu agrado.

- Por Daiki y porque el discutir por la atención de Neji me parece nefasto. Además, eso ya no importa escuché por ahí que está comprometido.

- No pienso hablar de eso.

- Bueno, bueno. Solo creo que sería bueno hacer las paces, ¿no crees?

Se detuvieron a un par de metros cerca de la entrada, miró la mano de Yue que estaba extendida y la tomó dudando un poco.

- Gracias por la ayuda.

- Que estuviéramos juntas de misión no significa que dejemos de ser rivales. -le guiñó el ojo- Hay que darnos prisa, tenemos que entregar un reporte a Tsunade-sama.

Ambas chicas se dirigieron a la torre, contándole a la Hokage que había ocurrido en su salida. Parecía feliz y hasta complacida, después de todo Gakuto había sido su discípulo y quería ayudar a que su sueño se cumpliera pues sabía cuánto le emocionaba. Dejó que Yue de fuera y pidió hablar unos instantes con Inohika.

- Hay un miembro nuevo en el equipo Kakashi, Sai está herido y su remplazo es..., un poco problemático. Te advierto porqué sé que has estado un poco... sensible y espero tengas la paciencia para tratarlo, si se mete en algún problema con los demás me gustaría que tú pudieras dar una solución. Muéstrame que tanto has madurado, cómo te crió Gakuto-chan.