Promesas vacías. Neji Hyūga×OC. ||TERMINADA||

09; ¿Kawashima y Hyūga más qué amigos?

Tetsurama no mentía cuando decía que era muy estricta, entrenaba a su discípulos de sol a sombra y sus razones tenía. Los tres eran unos diamantes que solo debía pulir. Había transformado a ése joven tímido y sin mucho talento a un médico en avance con un nivel de kenjutsu. O Daiki, engreído con un poder que no sabía manejar y ahora tenía un excelente control de chakra, experto en su kekei genkkai y un gran estratega. Inohika, la niña boba que solo se dedicaba a dar apoyo moral ahora era veloz, fuerte y decidida. Su estilo de agua y tierra había mejorado bastante, controlaba su estilo de cristal y había hecho un gran avance con las habilidades del clan Yamanaka.
Además, no solo entrenaba con su equipo, también lo hacía con Neji y de vez en cuando Gai les ayudaba.

Estaba recostada en su cama, con ropa limpia, el cuerpo adolorido y un libro en manos que ahora se había convertido en su favorito pues el protagonista se llamaba Naruto, como su amigo.

-Vamos a cenar fuera, ¿vienes? -Ino abrió la puerta de su cuarto- Bueno, no es como que tengas muchas opciones. No hemos hecho la despensa y no hay nada.

— Ya voy. —dijo arrastrando las palabras.

Salieron de la casa y echó un ojo a la florería, Daiki estaba atendiendo la florería, se sintió feliz por su amigo pues llevaba meses buscando empleo.
Ino hablaba de lo guapo que era y ella no podía negarlo, tenía el cabello verde, la piel blanca y ojos amarillos.
Akina, la madre de Ino mantenía una postura serena a lado de su esposo Inoichi, tomados por los brazos. Inosuki parecía la mujer más feliz, tomada de la mano de Gakuto y haciendo una broma se vez en cuándo pensó que si algún día llegaba enamorarse esperaba que fuera un amor tan bueno como el de sus padres.

Tomaron asiento en la mesa más grande del BBQ, los Akimichi y Nara ya estaban ahí, a su lado izquierdo tenía a Shikamaru, y del derecho a Ino. Era una noche muy tranquila, hace mucho tiempo que sus familias no se reunían así, últimamente todos tenían misiones todo el tiempo, de hecho, no había visto a sus padres en las últimas tres semanas.

-¿Shikamaru, por qué no entrenas con Hika? -preguntó Chōza— Ella también pasó, ¿no es así?

-Porque ella entrena muy duro, —se estiró en su mismo lugar— y yo no necesito de ése entrenamiento, soy más de estrategias y Asuma me ayuda con eso.

-¿Y tú con quién entrenas? -preguntó Yoshina mientras tomaba carne para servirlo en el plato de Shikaku.

— Entrena con su novio Neji. —chilló Ino—Todo el día se la pasa con él, y por las noches cuando llega aún solo habla de lo asombroso que es.

— ¡Ino! Eres una entrometida. —Hika le dió un tirón de pelo a lo que la rubia se quejó.

— No es que tenga algún problema con Neji, —comenzó a explicar Gakuto— de hecho siempre me ha agradado. Es fuerte e inteligente —le dió un trago a su vaso lleno de sake— es el hijo de Hizashi, de verdad me agrada, pero preferiría que salieras con algún Akimichi o Nara. ¡Cómo Shikamaru o Chōji!

— Se ven tan lindos juntos —dijo Gin, la madre de Chōji.

— No podemos ser novios, —explicó el Nara con un gesto de asco— Gaara del desierto está enamorada de ella. —todos los adultos posaron su mirada extrañada en él, mientras que la bicolor tosía dramáticamente— El hijo menor del Kasekage, a todos amenaza con matarnos, incluso intentó matar a Lee en el hospital pero a ella le dijo que se recuperaba y que la vería en las finales.

-Oye, ¿de qué lado estás?

— Lo siento, pero no voy a dejar que me arrastren en esto otra vez.

— De cualquier forma, ustedes dos. —Inosuki señaló a las dos preadolescentes— No pueden elegir a su novio, primero tienen que enfrentarse en un duelo para saber quién de las dos tomará el lugar como líder.