Desvíe un poco la mirada, mientras apretaba mis brazos con algo de fuerza, tenía un pequeño conflicto conmigo misma, donde un lado me pedía que fuera más valiente y que saliera junto a los chicos conociendo los riesgos, pero el otro lado me decía que esto podría ser muy peligroso y que mejor me quedará aquí donde estaba más segura.
"Un arma de doble filo"
—Esos malditos villanos no se van a cruzar en nuestro camino –Habló Bakugo. Volteé a verlo– Y cabello de pinchos tiene razón, si quieren pelear, lo haremos juntos –Levantó una de sus manos para hacer unas explosiones–.
—Te recuerdo que aun no tienes tu licencia –Habló Uraraka detrás de Mina y Kirishima–.
—¡Oe, maldita de cara redonda! ¡Te mataré! –Se giró inmediatamente muy enojado–.
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—¡Bakugo, deja de insultar a la gente! –Gritó Iida también–.
—¡No me des ordenes!
—¿Cómo saben si todo estará bien? –Pregunté en un susurro mientras empuñaba un poco mis manos– ¿Cómo saben que nadie saldrá a atacarnos?
—No lo sabemos, –Respondió Todoroki– Pero no vale la pena vivir con miedo todo el tiempo, en algún momento tendrás que enfrentarte contra el, sino te costará mucho volver a levantarte, y ninguno de nosotros quiere verte con miedo todo el tiempo.
Nos quedamos mirando por unos segundos, él parecía sereno, pero yo estaba con el ceño levemente fruncido, aunque solo desvíe un poco la mirada mientras enterraba mis uñas con fuerza en las palmas de mi mano.
—Además, –Habló Uraraka un poco nerviosa– Aizawa-sensei nos dio permiso, le preguntamos y todo, dijo que sería bueno para todos, solo nos pidió que estuviéramos a las cinco de la tarde aquí, ya que a esa hora donde generalmente empiezan los problemas, o si sucedía algo, que lo llamáramos enseguida.
