—Será algo difícil esta batalla... –Susurró Izuku mientras caminábamos. Llevé mi vista hacía él–.
Estábamos unos pasos más adelantados que los demás, y como ellos parecían estar hablando de quizás que cosa, Izuku se sintió en confianza para decir esas palabras, a él también le preocupaba un poco el resultado.
—Si... –Respondí de la misma forma– Aunque solo es un entrenamiento, debes quedarte tranquilo –Embocé una sonrisa– Y si perdemos, no será culpa de ninguno.
En cierta forma, eso logro tranquilizarlo un poco, pero algo me decía que era otra cosa que podría estar ocurriendo en su cabeza, aunque no preferí preguntarle, solo me quedé junto a él mientras pensaba.
—Kazumi.
—¿Mhm? –Pregunté sin voltear a verlo para que no se sintiera presionado–.
—Creo que algo le está sucediendo a mi poder... –Volvió a susurrar. Volteé a verlo suavemente, y espere a que continuará– No lo sé, siento una sensación extraña, como si algo recorriera dentro de mi, es algo que no puedo explicar –Hizo una pequeña mueca mientras empuñaba una de sus manos, pero sin llevar en ningún momento su vista hacía mi– ¿Recuerdas cuando rompí la ventana de mi habitación?
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Finalmente llevó su vista hacía mi, expresando cierta preocupación, pero tratando de mantenerse sereno. Aunque yo tuve que apartar la vista durante unos segundos para poder recordar mientras llevaba uno de mis dedos hacía mi mentón, tratando de hacer memoria.
—¿Fue cuando fui a la cena familiar de la familia de Shoto, no? –Pregunté al tener un vago recuerdo en mi cabeza mientras llevaba mi vista hacía él, no estaba segura. Asintió– Dijiste que la habías roto por accidente, ¿Acaso no fue así?
—En parte si fue un accidente, pero fue cuando estaba durmiendo –Respondió volviendo su vista hacía el frente, algo apenado– Tuve un sueño muy extraño, habían personas que nunca antes había visto en mi vida, y estaba desnudo, pero ni si quiera podía hablar, no sé como explicarlo...
—¿Esa sensación a vuelto? –Pregunté manteniendo mi vista sobre él mientras seguíamos caminando–.
