Alessio
Estaba enojado con ella, conmigo, con el mundo, con todos. Iba a dejar que me casara, y al final me ayudo, cuando no lo quería. Quería probar que podía cuidar lo mío, quería probar que podía solo. Y a pesar de estar enojado, aún seguía perdidamente enamorado de ella, y eso me enojaba más. El hecho que se fuera a casar con él, estábamos como al principio, solo que esta vez ella si quería casarse.
Verla con él me hacía rabiar, verla convertida en algo que no era, que lo dejara, y sus respuestas dolían más.
Me ayudo cuando mi mundo se demoraba, cuido de mí, y me ama.
Yo también la amo, y no quería dejarla, pero no nos elegimos, ninguno de los dos lo hizo, elegimos algo más en vez de nuestro amor, como siempre.
Se secó las lágrimas, la abracé, yo también me sentía raro ver que todo que planeábamos, lo estábamos cumpliendo sin el otro. Bese su frente y ella hizo lo que siempre así acurrucarse a mí como si fuera un refugio y me gustaba eso.
No se acordaba que estábamos casados, y quería decírselo, pero no podía exigir que me amara.
—Sabes
—Mmmm
—Tengo hambre —Sonreí —Que te parece comer fideos chinos, podemos llamar, conozco un lugar superbueno —Se separó y me miro —Tienen unos tallarines salteados, que son una delicia, Marcos, el cocinero, no me quiso dar su receta
—¿Conoces al cocinero? —Agacho la cabeza y la miré
—Cuando estaba en el orfanato, no había comida para todos, tenias que luchar por un plato, un día me fugue, no había podido comer, ese día, junto a otros tres niños y entramos a robar en un restaurante, nos descubrieron, a ellos por ser menores los regresaron, yo fui detenida. El hombre del restaurante dijo que si tenia hambre solo debía pedirlo, después de estar tres días dentro, fui a pedir comida a cambio de lavar platos.
—No sabes cuanto lamento no haberte encontrado —Me miro
—Alessio yo no te culpo y nunca lo haría, sabía en lo que me metía, yo lamento haberte dejado, no quería pero no tenia elección
—¿Cuánto tiempo después los Williams te adoptaron?
—Tres meses, no tenia probabilidades de que lo hicieran, la mayoría busca niños pequeños, pero vieron algo en mí que ni yo vi, al principio fue difícil, pero me comencé a llevar bien con Richard y Jason, interactúe con Jane y Patrick. Encontré una familia.
—Llamemos entonces —dije
Ella se estiró y tomo el teléfono del departamento, marco el número de memoria y hablo en chino un rato y después colgó.
—Nuestra comida llegará en unos minutos
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Passione
RandomPerdió, perdió lo que sabía que iba a perder, pero aun así dolió. Los recuerdos son objetos valiosos que uno atesora, pero hay veces que tienden a desaparecer o a quedar en el olvido. La mente de Rouses es un campo minado que no permite ir más hall...