Jack tuvo que llamar a Alessio, mientras revisaban el castillo de arriba abajo, no encontraron nada, fuese quien fuese, había burlado las cámaras de seguridad. Me sentí insegura, pero no se lo demostré, sabía que vendría corriendo a verme, pero tenia otras cosas de las cuales encargarse.
Me dejaron ir al evento solo para que más personal verificasen el lugar, pero no había nada, mi temor más grande fue el saber que sabían que estaba embarazada.
Cuando llego no hizo más que hablar con Jack y James, la ceremonia se llevaría en tarde, faltaba tres horas para ello.
—¿Cómo estás?
—No tan molesta como tú —Me miro y tomo aire —Lo sé, pero no quiero que eso nos arruine el día
—Sea quien sea lo encontraré Rouses
—Lo sé —Pase mis manos por sus hombros —Pero estaré bien, ambos lo estaremos, porque sé que no dejarías que nada me pasara
Junto nuestras frentes, y me beso, nos quedamos así un rato.
—Hable con tu padre
—¿Con mi padre?
—El señor Williams, le pidí tu mano y le dije que la fiesta se celebra dos días después, pero que debíamos anunciarlo primero, sigo vivo, tu hermano Jason estaba ahí
—¿Te hizo algo?
—No solo me miro y dijo que si te lastimaba, él y tus hermanos me harían pagar, y le creo
—¿Les diremos a tus hermanos?
—Mañana
—Mañana ya se hace público
—Hoy está bien entonces —Beso mi frente
Solo habría seis personas en mi boda, contando con el cura, me alisté una hora antes, pero los nervios pudieron conmigo, estaba tan nerviosa.
Al bajar ya estaban ahí todos, Jack sería el testigo de Alessio, mi abuela me miro y me puso una manilla.
—Ahora es tuya —La mire —Era de mi madre, y de su madre antes de ella, hacía juego con la manilla de Arabella, esta —Levanto su muñeca —Se la quito —Dásela a tu hija, si es que decides tener una
—Gracias abuela
—Bien, empecemos
El padre realizó una ceremonia sencilla, me resulto tan rápida que cuando me di cuenta ya estaba firmando mi acta de matrimonio. El padre pidió los anillos, y Alessio saco un anillo y se lo dio, le padre bendijo la joya, y Alessio me la puso en la mano derecha.
—Cuando nos volvamos a casar te lo cambio de lugar
Besar a Alessio me regreso a tierra, nos habíamos casado y nadie sabía. Maritza repartió el licor y para mi jugo de uva. Subí a cambiarme seguida de Alessio que miraba más de la cuenta el lugar como un lunático.
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Passione
RandomPerdió, perdió lo que sabía que iba a perder, pero aun así dolió. Los recuerdos son objetos valiosos que uno atesora, pero hay veces que tienden a desaparecer o a quedar en el olvido. La mente de Rouses es un campo minado que no permite ir más hall...