Mal presagio {Taekook/Yoonmin/2Jae}

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— No sé cómo ni porqué, pero... tú siempre consigues que me sienta mejor. — Jungkook murmuró un poco tímido a la vez que una sonrisilla involuntaria se dibujaba sobre sus labios. Taehyung retiró las manos de su rostro y le observó en silencio. — Es como... que siempre eliges las palabras correctas. Tanto en las situaciones buenas como en las malas.

— Uh, ¿te sorprende? — El pelirrojo adoptó una actitud triunfal y se venció ligeramente hacia atrás, apoyando todo su peso en sus manos sobre el colchón. — Soy un tipo bastante inteligente.

— Puedo verlo, sí.

El menor rio y le admiró en silencio por unos segundos, encontrando demasiado linda la sonrisa cuadrada del contrario. Tan libre de maldad en ese momento.

— De verdad me relaja verte así. El otro día me asusté cuando estabas con el cuerpo paralizado, así que ver que mejoraste me tranquiliza bastante.

Taehyung asintió y volvió a echarse hacia delante para encararle. Jungkook sintió su corazón en la garganta cuando el contrario redujo la distancia.

— Mm, ¿sabes? Si sigo así es probable que salga pronto del hospital. — Medio mintió el mayor, pues sabía que aquella no era una verdad certera por mucho que así quisiera creerlo. Aunque como nunca podía saberlo con seguridad, sí que cabía la posibilidad de que abandonara el centro médico en escasos días. — Así que cuando esté fuera, recuérdame que te lleve a un sitio que seguro te va a encantar.

Jungkook ladeó la cabeza con desconcierto.

— ¿Qué sitio es ese?

— Ah, sorpresa.

— ¡Yah! Hyung... ¿No me vas a decir?

Taehyung negó fervientemente con la cabeza.

— Quiero ver tu reacción cuando estés allí y lo veas por primera vez.

— Ahora tengo mucha curiosidad.... — El menor murmuró con sus labios abultados en un puchero. Por el contrario, la sonrisa misteriosa perduró en la boca del pelirrojo.

Sin embargo y al pensarlo en profundidad, Jungkook cayó en cuenta de un detalle importante y una mueca de preocupación se dibujó en su rostro.

— Hyung, en realidad... dudo que podamos hacer eso. — Musitó con un incómodo sentimiento de culpabilidad. — De hecho, lo veo casi imposible. Al menos de aquí a unos cuantos meses.

— ¿Por? — Kim no pareció contagiarse de su bajón anímico.

— La verdad es que vine a verte para despedirme de ti por un tiempo. — El pelirrojo frunció el ceño con desconcierto al escucharle decir aquello. — Yo tengo... mm, bueno, yo... En resumidas cuentas, se podría decir que tengo algunos problemas con mi grupo y seguramente me confinarán en mi distrito. Pero no sé cuantos días. Quizás meses... — Aclaró mohíno a la vez que evitaba el contacto visual directo. — Lo que quiero decir es que o no vamos a poder tener contacto, o que será más difícil para mí comunicarme contigo. Tampoco vendré a verte a partir de ahora.

Luego de aclarar la situación, el azabache se atrevió a conectar sus ojos con los del chico frente a él. La mirada tranquila y serena de Taehyung le desconcertó por un momento.

— ¿Estás en problemas graves? — La voz del mayor también sonó calmada.

— No creo. — Y es que él tampoco estaba demasiado seguro de esa parte. — Es solo que no me he portado muy bien últimamente, así que el líder me tiene en el punto de mira. Jimin hyung también está molesto conmigo. — Añadió. — Y él es cabezón y vengativo, así que no me dejará escapar de esta tan fácil. — Sonrió nervioso. — Pero creo que puedo manejar la situación si se trata de él. Aprovecharé este tiempo para intentar solucionar las cosas con mis amigos y también... mi situación general.