One in a million (Steve Rogers & tú) (Steve Rogers y tú)

Capítulo XLII: Para ti

- Perdón, pero no puedo seguir hablando de esto, además si Steve quiere me aleje, lo haré – le dije guardando la calma.

- Sabes muy bien que él no te lo pedirá – dijo molesta – él solo está encaprichado contigo, él nunca te amo, solo eres su pasatiempo favorito y sabes por qué lo digo – estaba siendo algo cruel – porque cada vez que estaba contigo al final terminaba regresando a mí, a mi lado, a mis brazos – sequé rápidamente la lágrima que rodó por mis mejillas, ella sonrió.

- Siempre supe que eras una loca – dijo Bucky acercándose, había estado oyendo toda la conversación – no eres para nada igual a Peggy, ni siquiera pareces su sobrina, ____ es demasiado buena cómo para decirte lo qué realmente piensa, pero yo no, eres una psicópata, y solo usas ese embarazo para atar a Steve, espero que él lo note y no pierda la oportunidad de estar con alguien como _____ y ni se te ocurra volver a hacerla sentir mal sobre todo sí estoy cerca – le dijo acercándose a ella.

- ¿Me estás amenazando? – le preguntó.

- Tómalo como quieres, loca – le dijo viéndola mal, ella de lo que estaba sonriendo pasó inmediatamente a quejarse de dolor.

- Sharon ¿estás bien? – preguntó Steve acercándose a ella preocupado – ¿qué le dijiste, Bucky? – le preguntó molesto.

- La verdad – respondió – ella le dijo – coloqué mi mano sobre su hombro para evitar que siguiera hablando.

- Suficiente, Buck – le dije, no quería problemas.

- Pero – negué con la cabeza para que no hablara – de acuerdo, será como quieres.

- Necesito aire fresco, me duele la cabeza – dije para salir de la habitación, Bucky salió detrás de mí.

- Debiste contarle a Steve como te habló – me dijo Buck.

- No quiero problemas, Buck, ella está embarazada y su embarazo es de cuidado, si algo le pasa al hijo de Steve por mi culpa, no me lo perdonaría, está tan ilusionado.

- Que ella sea una obsesiva no es tu culpa, que esté embarazada no le da derecho a hablarte así y tú no te quedes callada, nunca lo hiciste antes y no lo harás ahora – volví a llorar – no llores – dijo secando mis lágrimas – yo también te amo, pero no por eso, te diré que me dejaste embarazado e intentaré atarte a mí – reí – esa es la sonrisa que siempre quiero ver en tu rostro, yo haría cualquier cosa por mantenerla – solo le sonreí, me abrazó – espero que todo salga bien para ti.

- Gracias Buck – dije abrazada de él.

- Veo que ya te sientes mejor – dijo Steve detrás de nosotros, nos separamos – ese es mi lugar – dijo para acercarse a mí y abrazarme, le correspondí a su abrazo, lo necesitaba tanto.

- Espero no lo olvides, Steve – le dijo Buck – te veo luego, solecito – me dijo para irse.

- Te dije que solo estaba ayudándose – me dijo – ¿has estado llorando? – dijo viéndome – ¿pasó algo con Sharon mientras me fui?

- No, solo ya sabes que todo esto que ha pasado me preocupa – se acercó a abrazarme.

- Y ya te dije que yo te voy a cuidar, solo me importas tú y mi hijo, son las personas más importantes para mí – le sonreí – por más que tengas toda esa energía del Fénix para protegerte, siempre estaré poniendo el pecho por ti.

- Lo sé, Capitán, así siempre ha sido.

- Y siempre será – me respondió para besarme.