T2 - Capítulo LXXXVI: La reina y el rey

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-        Vamos, te llevaré a tu auto – me dijo Steve – Bucky me escribió, dice que está por salir – pensé que me llevaría en una silla de ruedas, pero no, me alzó en sus brazos, yo puse mis brazos alrededor de su cuello, su aliento acariciaba mi rostro, su barba había empezado a crecer más, debía admitir que le sentaba, yo estaba segura de que estaba enamorada de Bucky y que lo amaba, pero Steve siempre será el primer hombre que amé, con el experimenté todo por primera vez, lo bello y doloroso que puede ser el amor, pero tenía tantas preguntas en mí, que se reducían a que él y yo jamás debimos separarnos, cuando por fin decidimos estar juntos, todo era felicidad, pero Sharon se aprovechó de lo bueno que es Steve, lo cual hace que él llegue a ser manipulable hasta un punto extremo, si hubiéramos sabido la verdad a tiempo, él y yo seguiríamos escribiendo nuestra historia de amor, una pequeña parte de mí, seguía creyendo que nuestra historia no había acabado, seguía haciendo que mi cuerpo y mi corazón solo siguieran siendo de Steve, pero no, yo estoy con Bucky y estoy bien con él.

-        Así te quería ver – oí su voz, era Sharon – colocando tus tentáculos alrededor de mi esposo – sentí que quería explotar.

-        Tranquila – me dijo Steve con un tono de voz sereno contra mi frente provocando que la piel de mi rostro se erizará – no le prestes atención, es lo que hago – pasó por su lado sin ni siquiera mirarla.

-        Te estoy hablando, Steve – gritó Sharon, se acercó a él y puso su mano en el hombro para que lo viera.

-        ¿Qué quieres, Sharon? – le preguntó fastidiado, creo que ya se habían visto antes.

-        Que sueltes a esta y vengas conmigo – le exigió.

-        Esta es mi solecito y no la voy a dejar, sobre todo cuando me necesita – mi corazón se emocionó al oírlo – yo no tengo nada que hablar contigo, ya te dije si me quieres decir algo que sea a través de los abogados.

-        No te daré el divorcio.

-        No necesito que me lo des, con todo lo que has hecho es suficiente para pedir por mi propia cuenta la anulación, ya te lo dije.

-        Tú quieres el divorcio para irte detrás de ella, pero entiende Steve, ella se casará con Bucky – ¿cómo rayos sabía eso?

-        ¿Y cómo sabes eso tú? – le preguntó Steve, ella se puso ligeramente nerviosa – se supone que no has estado por aquí por un buen tiempo – debía seguir a Sharon sí quería respuestas – no estoy para perder más mi tiempo contigo, ya te di demasiado, adiós, Sharon – dijo para darse la vuelta.

-        Si te vas, no volverás a ver a Benji – le dijo.

-        No puedes, él lleva mi apellido y Pietro no te dejará hacerlo, tiene derechos como padre biológico, somos dos contra una – Steve siguió caminando sin hacerle caso a los gritos de Sharon, llegamos a mi auto, él me bajo unos segundos para abrir la puerta del auto, me volvió a cargar para sentarme en el asiento del copiloto, me colocó el cinturón de seguridad, se apoyó en la puerta abierta – el día que Bucky se fue a Budapest cuando me dejaste en el Complejo, encontré a Sharon aquí, según ella había venido a buscar a Benji, pero la encontré metida en mi habitación, obviamente le reclamé por todo y la saqué de mi habitación, más tarde le pedí a Tony que hablara con sus abogados, estuvimos toda la noche preparando el caso, no necesitaba la firma de Sharon para el divorcio, así que mientras tú estabas en tu prueba, yo estaba unas calles más allá, dejándole los papeles a Sharon, me llamaste y la dejé para ir a verte – entonces ella no fue quien mató a mi bebé, pero sí, la cómplice, Peggy no podría soportar saber que su sobrina trabaja con la organización que tantos problemas nos ocasionó – si no te dije nada fue porque estás pasando por demasiado, no quería agobiarte con tus problemas.

One in a million (Steve Rogers & tú) (Steve Rogers y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora