(extra)Ordinaria | KookMin

LXXI.

LXXI

Jimin no tuvo que hablar sobre lo que había vivido. Los vídeos lo decían todo.

—Me dices que... ¿Están los más antiguos?

Se refería a cuando Jimin tenía doce años. Yugyeom asintió. Le propuso verlos, pero Jin se negó. Sólo imaginarlo le causaban ganas de vomitar. Sin embargo, tuvo que leer la descripción de los hechos. Le dolía la cabeza al pensar en Jimin siendo tocada por extraños; lo mismo que aquel niño, Jungkook.

Jin tenía curiosidad con respecto a él. Comparándolo con Jeongguk, se parecían muchísimo.

Apretó los dientes.

—La muerte de Chaeyoung fue violenta. También la del otro hombre.

—Quiero que me eches toda la culpa.

—Pero esa mujer, Jeongguk...

—Es la novia de Jimin, no puedo separarlas. No ahora.

—Bien, lo que digas.

—Me pregunto por qué buscó a Jimin después de todo este tiempo...

—Por la misma razón por la que mató a sus padres, Jin. Él estaba obsesionado con ella. Quería convertirla en una Barbie de verdad.

Era lógico. La niña de doce años que había rescatado se comportaba extraño y pensaba en que su cuerpo debía ser cuidado al extremo. La sumisión y la predisposición a ser usada... La obsesión por la comida había permanecido, por lo que Jin tuvo que pulir sus talentos culinarios para hacerla feliz sin que se sintiera culpable por ingerir muchas calorías. Todos esos detalles cobraban sentido.

—Jimin, pobrecita...

—Ella es fuerte. —dijo el forense, rostro serio.

—Lo es.

—La otra joven, Min Yoonji, también pasó por mucho —cambió de tema—. Luego de la muerte de su hermano Nikolay, Alexander quedó más vulnerable. No era el hermano inteligente, sus finanzas estaban mal y, según lo que encontramos en el motel Jeju, que resultó ser su lugar de actividad, estaba en quiebra. Buscaba aprovecharse de Min Yoonji y posteriormente pedirle una cantidad de dinero exorbitante a su familia.

—Dinero que, por supuesto, darían.

—No hay duda. El ADN de esta chica Min concuerda con el del cabello de antaño que encontramos en la habitación del chico robado, ¿recuerdas?

—Mmh, ¿el de la Harley y la nota amenazante? —Yugyeom asintió— Lo que faltaba... ¿Sus padres habrán sido los que me amenazaron? —de nuevo, un asentimiento de parte de Yugyeom— ¿Sabes algo de Jeon Jeongguk?

—¿Ah? ¿Cómo lo supiste? Es la mujer que faltaba por los alrededores la noche del asesinato del chico de la Harley. También es sospechosa.

—Joder...

—¿Qué pasa, Jin?

Min Yoonji y Jeon Jeongguk se conocían.

Min Yoonji era la persona que había matado al chico de la Harley, episodio de hacía mucho tiempo atrás.

Y Jeon Jeongguk había sido su cómplice.

No sabía por qué no se asustaba ahora que sabía la verdadera naturaleza de Jeongguk. Namjoon se volvería loco, imaginando una cantidad inconmensurable de escenarios en los que Jeongguk dañaría a Jimin; pero Jin, después de verla interactuar con su pequeña, sentía que ella era alguien para confiar. Tan leal como un perro.