Perfectamente imperfectos

Capítulo 54: Segunda cita

Pov Alexa

Cuando suena la campana que anuncia el recreo me dirijo al piso donde se encuentran los salones de tercer año.

Me detengo frente al aula de Justin y espero que salga.

Un par de minutos después el profesor sale de su clase y casi tras él veo a quien busco, se acerca a mí.

- Necesitamos hablar -Le digo y él asiente.

Caminamos hasta el salón de música donde se encuentran Bastian y Óliver.

- Hola Lex -Me saluda Óliver.

- ¿Viniste a ver el ensayo? -cuestiona Bastian.

- Chicos, ¿pueden darnos un par de minutos?

Ellos se miran entre sí y salen de la estancia, cierro la puerta para luego encarar a Justin.

- ¿De qué quieres hablar? -pregunta.

- Entre tú y yo no volverá a existir nada -reitero y le veo hacer una pequeña mueca.

- Alexa, no sé que...

- Cállate -exijo y guarda silencio, mirándome sorprendido-. Es tu turno de escuchar.

Le veo sentarse y prestarme atención.

- No siento absolutamente nada por ti -Me sincero-, ese cariño que una vez tuve por ti, terminó, se fue, y no quiero regresar a como era antes -admito.

- Dime Alexa, ¿te gusta alguien más? -cuestiona y lo miro a los ojos.

- Si -respondo-, y estoy segura de que sabes quien es.

Él baja la vista al suelo.

- Te perdí de una manera tan sencilla.

- Me perdiste por idiota -Le digo-, y no deseo que la relación entre ustedes se vea afectada, si aún queda en ti una pizca de ese amor que decías sentir por mí, lo entenderás y no volverás a meterte en el medio.

El sonríe débilmente y me observa, se pone de pie y se acerca a mí, asiente con la cabeza.

- De acuerdo -dice y suspiro con alivio-, si de esa manera ustedes son felices, entonces me rindo Alexa, siento mucho el daño que te llegué a causar.

- Gracias Justin -agradezco, él pasa por mi lado sin decir más y sale de la estancia, suspiro cansada y me dispongo a ir a por algo de merendar.

Pov Justin

No puedo evitarlo, no puedo impedir que Dylan y ella estén juntos. Tampoco tengo ningún derecho para interponerme entre una relación de ambos.

Alexa tiene razón, yo fui el único culpable de que nuestra relación se fuese al carajo.

También anteriormente he herido a mi hermano, nunca he sabido superar las cosas bien, creo que ya es hora de que comience a hacerlo.

Veo a Dylan más adelante sentado en la gradas, me dirijo hacia él y me siento a su lado, me observa extrañado.

- Supongo que Óliver y Bastian te contaron y sabes de donde vengo -comento y él ríe.

- Si, lo sé -Me mira divertido-, ¿te golpeó?

- No -niego y hace una pequeña mueca.

- Sólo le gusta golpearme a mí, ¿será que así demuestra su amor o qué? -masculla y toma de su batido.

Su comportamiento me deja algo confuso.

- ¿No preguntarás nada?

Una media sonrisa aparece en sus labios.