ANNE
Los ojos de Tom me miran fijamente poniéndome mas nerviosa de lo que ya estoy, acaso de terminar de explicarle todo después de una hora, creo que jamás me había tardado tanto en hablar, pero quería explicarle todo con lujo de detalle, sin que me falte nada.
Yo tampoco dejo de mirarlo, me preocupa un poco su respuesta, Tom puede ser muy negativo cuando se lo propone.
Cuando me dijo que me quedara no podía creerlo, me emocione, no pensé que fuera a ceder, no lo pensé dos veces en quedarme, lo que más quería era explicarle las cosas, no puedo estar sin él, ademas, debo admitir que la culpa es mía por no habérselo dicho antes.
—Tom...
—No se si...si pueda perdonarte totalmente— me remuevo un poco ante sus palabras —Es decir, es muy difícil obtener mi perdón por completo.
—¿Que?
—Ya sabes, tienes que hacer algo para que yo pueda perdonarte.
Aprieto mis labios escondiendo la sonrisa que se me quiere escapar.
—¿Estas usando mis frases y mis métodos?— inquiero con exageración.
—Tal vez.
Me hinco y me acerco más a él —¿Que quieres que haga?
—No lo se, creo que tendrás que ponerte creativa.
—¿Que tanto?
—Mucho— sonrío, voy a besarlo pero recuerdo su nariz —¿Que?
—Pero ahora no, te va a doler— me acomodo bien en mi lugar —Además, dijimos que sin sexo hasta que tu divorcio estuviera firmado.
—Cuando te consolé tuvimos sexo.
—Pero eso era porque estaba triste.
—Pero ahora yo estoy molesto.
—Y con la nariz rota, así que hasta que te cures bien podré pedirte perdón solo como nosotros sabemos hacerlo— medio sonríe.
—¿Por que te tienes que preocupar tanto?
—Por que te amo— me mira a los ojos —Tom...
—¿Si?
—¿De verdad me perdonas?
—Si— toma mi mano —Quiero decirte muchas cosas ahora pero me duele mucho esta cosa y tengo que tomarme el medicamento— suelto una risa —Solo diré que no puedo estar sin ti.
La abrazo con cuidado —Ni yo sin ti.
—Tengo que tomarme el medicamento— me separo de él.
—¿En donde esta?
—En la habitación, voy por el.
—Te lo traigo.
—Me acostaré también.
—Iré conmigo entonces— me da una pequeña sonrisa —Es que estoy feliz y no quiero separarme de ti.
Acaricia el dorso de mi mano cuando tomo la suya.
En la habitación le ayudo a acomodar las almohadas para que esté cómodo, no dejo que haga nada, le doy sus pastillas y aunque se queja, le ayudo a ponerse la crema en la nariz, es tan quejumbroso, no quiere que le ayude en nada.
Estoy tan feliz, me siento aliviada de que me haya escuchado y dado otra oportunidad, no se como cambió de opinión de la nada y no me importa, lo único que me importa es estar con él y no volver a fallarle jamás.
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Clase a media noche | Tom Hiddleston
FanfictionThomas Hiddleston, el nuevo profesor, la sensación por su gran atractivo y esos ojos que enamoran a cualquiera, pero solo es imagen porque su carácter es fuerte, el profesor más estricto que cualquier alumno podría tener. Nadie entiende el motivo de...