CAPITULO 35

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ANNE

Le echo un vistazo a todos los videos que me aparecen en YouTube después de buscar como romper un huevo, elijo el primero ya que es el que tiene más vistas, en realidad no tantas, no hay tantas personas que vean estos videos, no entiendo, son muy útiles a mi parecer.

Le doy play al video y busco por toda la cocina el bowl en el que tengo que hacharlos, Tom tiene todo bien acomodado.

—Golpecitos ligeros...— lo hago y chillo de emoción cuando el huevo se parte dejando salir todo —Lo hice, lo hice, si, si...

—¿Que haces?— pongo el celular boca abajo rápidamente al ver a Tom.

—Me asustaste— suelto una risa —Buenos días.

—Buenos días— se acerca a mi, deja un beso en mis labios lo que me hace sonreír mas —¿Que haces?

—El desayuno— miro el bowl —Ya partí un huevo, ahora tengo que revolverlo, ¿cómo te gustan?

—Me gustan en omelette con jamón y queso.

—Bien— tomó un tenedor y revuelvo como una vez vi a Gaby hacerlo, no pude terminar el video.

—Pequeña...

—¿Si?

—Es sin la cáscara— muerdo mi labio.

—Ya lo se— miento —Es que estos son para mi, a mi me gustan así— ríe.

—Siéntate, yo cocinaré— dejo el tenedor y voy a sentarme avergonzada en un taburete.

—Aprenderé a cocinar, lo prometo— tira lo que ya llevaba y toma huevos nuevos.

—No hace falta.

—Quería hacerte un desayuno rico, soy una inútil, que vergüenza— sonríe.

—No eres una inútil, simplemente no se te da la cocina.

—Mejor dicho jamás he movido un dedo para aprender, mi mamá cocinaba rico.

—Bueno por que quizás no es de tu interés y está bien— bufo —Además, me consta que eres mejor en otras cosas.

Medio sonrío.

—¿Cuáles?

—Con la boca por ejemplo— y yo que pensé que sería una mañana tranquila.

—¿Ah si?— asiente encendiendo la estufa.

—Eres muy buena hablando, en las exposiciones también, esa boca no para— ruedo los ojos y el ríe.

—Tonto.

—Hermosa— sonrio.

Los siguientes veinte minutos me la paso mirando como Tom hace nuestro desayuno, de verdad quisiera saber cocinar y sorprenderlo con algo delicioso pero como soy una atenida lo único que puedo ofrecerlo es cereal con leche y más o menos ya que a veces me pregunto si va primero el cereal o la leche.

La verdad es que la comida le queda muy rica a Tom, tiene un buen sazón, perfectamente podría ser chef. El desayuno lo disfruto demasiado, tal vez todo se me haga maravilloso por que lo hace el.

—¿Vemos una película?— le pregunto a Tom quien está lavando los trastes conmigo a su lado sentada sobre la isla.

—Si, pero más tarde, ahora tengo que hacer un par de cosas del trabajo— hago una mueca —Lo siento, pero soy un hombre con responsabilidades.

—Como digas— termina de lavar el último sartén.

—No se cuanto tiempo me ocupare— separo mis piernas para que se acomode entre ellas —Quisiera pasar todo el día contigo, para que no te aburras si quieres te llevo a tu casa, aunque...

Clase a media noche | Tom Hiddleston Donde viven las historias. Descúbrelo ahora