Sirvienta del vampiro

Capítulo 64

Apenas sirvo la leche en el cereal Jessi aparece, sentándose tan estrepitosamente que se me cae la cuchara en el plato. Me quedo un segundo con los ojos puestos en mi desayuno pero siento los ojos de alguien encima de mi, levanto la mirada lentamente y efectivamente me encuentro con la mirada de Jessi acompañada por una sonrisa.

—¿Qué? —Pregunto con un timbre de risita al final.

—¿Adivina que? —sacudí la cabeza dejando a un lado el desayuno.

—Soy pésima adivinadora.

—En la escuela pronto nos llevarán a conocer varias universidades y creo que ya he decidido a cual voy a aplicar.—habla con voz cantarina al final.

Me ergui un poco contra la silla.

—¿A cuál?

—Pues ¿es que no es obvio? a la tuya por supuesto, ¿no te parece genial? Además Alys también se ha decidido por esa...

—Pero...

—¿Pero?

—¿Tienes claro que las probabilidades de toparte con Harry si entraras a Bosforo serían demasiado altas? —Hable con tanta rapidez que inclusive Jessi frunce el ceño.

—¿Harry?

—Ese Hemmings, es que me preocupo y no quiero que después te lamentes por tomar decisiones apresuradas, y no puedas disfrutar tu etapa universitaria como se debe solamente porque no te sientas cómoda en el lugar.

Su sonrisa decae lentamente medio jugueteando con los pedacitos de cereal que sobresalen en la leche —Pues tienes razón.., eso es lo que aun me tiene indecisa —Pareció recordar otra cosa porque me miro nuevamente con una sonrisa —¿Pero eso que importa ahora, cierto? Por el momento tengo dos meses y medio para tomar una decisión y por mientras me dedicaré a estudiar muy duro para que cuando tenga la prueba el mes que viene de universidad tenga el puntaje suficiente para ganar una beca, postularme a la universidad que yo elija junto con Alys.

—¿Y Freddy? ¿no piensa estudiar en alguna con ustedes?

Jessi pone los ojos en blanco.

—Ay por favor Lili Ann, Freddy es simplemente un adicto a la coca. Honestamente no creo que pase los exámenes de admisión y mucho menos que gane un examen para una beca universitaria. Freddy en una universidad es como pedirle billetes al cielo.

No se que cara pongo pero lo cierto es que frunce el ceño riéndose —No me mires así, lo mismo que te dije a ti se lo he dicho a él directamente. Pero ya perdí la fe en el, esta perdido.

—Nunca subestimes a alguien, no sabes que virtudes puede llegar a tener.

Entrecerro sus ojos, sonriéndome, como si lo que acabo de decir fuera bastante obvio.

—Bueno, la de Freddy no es precisamente la inteligencia.

De repente el sonido de la puerta siendo abierta junto con el chirrido que causa el llavero nos distrajo de nuestras conversaciones entrando nada más ni nada menos que mi madre en la escena.

Quien camino directamente hacia nuestra mesa.

—Hola ma ¿como estuvo el trabajo? —Canturreo Jessi animadamente.

—Muy bien mi linda —Mamá se agacho a la altura en que Jessi estaba sentada hasta besandole la frente. Pero apenas levanto la vista a mi dirección algo se alarmó dentro de mi alma. Me dio aquella mirada que los hijos le conocemos perfectamente a nuestras madres —Y tu...

—Hola mamá.

Se aleja de Jessi mirándome en silencio.
Vi algo indescifrable en sus ojos y en ese momento comencé a impacientarme.