Sirvienta del vampiro

Capítulo 26

Mi cuerpo dio una vuelta completa mientras mis manos se aferran al borde de la mesa, mi cuerpo trató de inclinarse lo más lejos posible de su contacto, pero fue algo casi nulo porque literalmente estábamos a menos de 20 centímetros de distancia.

— ¿Qué hacías con el? ¿están saliendo o que? —Harry señalo duramente mi cara con su dedo índice.

Lo mire por unos segundos antes de reirme por lo ridículo que se veía reclamandome. —Y si estuviéramos saliendo ¿qué? ¿Que te importa? —contesté, aunque sabía que la respuesta era un claro "NO".

La mirada de Hemmings se puso aterradoramente oscurecida. Una mirada difícil de descifrar y dominante. Mi cuerpo por instinto da un paso hacia atrás, pero todo lo que obtengo es el chirrido suave contra la mesa.

—Ya lo sabía yo, siempre lo haces así.

¿Qué?

Mi cabeza comenzó a buscar distintos significados a sus palabras antes de sentir como intespentivamente agarraba mis manos y las apretujaba devuelta. Mi corazón comenzó a agitarse asustado y trate de luchar para soltarme, pero era imposible con el nivel de su fuerza.

Su rostro se acercó al mío —¿Como?

—Eso quiere decir que siempre te acuestas con otros, ¿no? —Harr aflojo el agarré. Cuando su cuerpo se acercó más finalmente su mano soltó mis brazos de manera definitiva.

—¿Me acuesto con otros...? —mi boca trató de calcular una palabra. Otra palabra, ¿cómo podía afirmar que me acuesto con tipos cuando sólo me vio abrazar a alguien?, pero me di cuenta que no debería rendirle cuentas y aproveché esos segundos empujando su cuerpo y caminando hacia la puerta. Cuando lo mire devuelta sus ojos eran negros y su cuerpo estaba más pálido que antes. Trague saliva varias veces y trate de caminar lentamente, el no debe saber que tengo miedo. —¿Si tengo sexo con el o con otro que te importa? No te metas en mis cosas.

Cuando trate de abrir la puerta estaba bloqueada.

Comprimi los labios mientras mis dedos trataban de aflojar la puerta. Jale y jale la cerradura varias veces. —¡Sueltame! —gemi de miedo cuando Harry agarró mi cuerpo por la parte baja de mi cintura empujandome suavemente contra la pared.

—¿Si? — me miro atentamente. Tenia nervios mezclados con el miedo —¿te acostaste con Larry? ¿desde cuándo? ¿con cuáles otros lo has hecho?—mis manos trataron de empujar su cuerpo lejos de mi.

—Ya... yo... ¡NO!... —mi voz se abrió por lo bajo, —No tengo nada con el... —respondi con honestidad cuando su cara comenzó a acercarse —ni con nadie... ahora... ¡ahora sueltame!

Y así fue como su temperamento cambio absolutamente. Hemmings simplemente sonrió, no tengo claro si para mi o para si mismo. Su cuerpo calló sobre el mio, aplastando mi cuerpo —ya respondí y ahora alejate de m... —mi boca dejó de hablar cuando sus labios aplastaron los mios. Su mano izquierda tomó la parte  baja de mi rostro mientras su boca mordia mis labios con fuerza, forzando mi boca a dejar de estar  cerrada.

Deliberadamente me soltó. —¿Qué te pasa? —cuando no hubo respuesta de su parte lo abofetee impulsivamente.

Pero en lugar de alejarse o al menos molestarse Harry sonrió mientras daba pisadas que me obligaban a caminar torpemente hacia atrás. Mi reflejo automáticamente  pateo a Harry en el estómago, pero lo que obtuve fue nada. Como si no le afectarán mis golpes.

Hasta que mi cuerpo se tropezó contra la parte trasera con algo, callendo sobre un sillón blando y blanco. Harry pronto estuvo encima de mi, y todo estaba pasando tan rápido que nisiquiera lo creía. —Maldito seas, ya bajate —le ordene pero el calló mi boca con sus labios suaves y dulces.