Capítulo 58 | Tate

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Dos meses, inclusive el invierno se está yendo.

Al inicio no quería reconocer lo que estaba pasando, me encontraba tan aturdida por todo, que llegué a pensar que podía tratarse de solo un mal sueño, pero los días seguían pasando, y yo continuaba sin saber nada de Ethan. Él solo desapareció sin dejar rastro, cómo si nunca hubiese existido. Es tan radical, que, si no tuviésemos conocidos en común, podría llegar a pensar que todo fue parte de mi imaginación.

Estas semanas han sido complicadas para mí, no quiero aceptar que él no está. Intenté tantas veces preguntarle a Jordan, que perdí la cuenta, sé que no es su culpa, él tampoco tiene idea de dónde se encuentra ahora o una verdadera explicación del porqué se marchó, porque me niego a aceptar que solo se fue por una excusa tan ilógica como la que me dio.

Aunque me dolió con toda mi alma, me prometí no volver a preguntarle sobre Ethan a su amigo, me dije que sería la última vez, si él ya no quiere saber nada de mí, o responderme alguna vez, no insistiría más, no tiene sentido. He llorado todos los días, preguntándome qué fue lo que hice mal, en qué momento fallé o me descuidé y no me di cuenta que, en realidad, no estábamos avanzando, que todos los momentos felices no me dejaron ver todas las capas que él aún escondía de mí. De todos.

Me prometí a mí misma que lo daría todo por querernos, por estar juntos, por superarlo, pero parece que fui la única que lo hizo, la que estaba realmente comprometida. Sigo esperando encontrarlo en las mañanas y escuchar su voz, ver su mirada dedicada solamente a mí, sus hoyuelos, soportar sus bromas, su bondad.

Solo sé que, aunque ya se fue, quiero que se quede.

La persona correcta en el momento perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora