Hoy es el cumpleaños de Ethan, y ya tengo todo planeado. Con ayuda de mis padres, he decorado la casa con globos y letreros, en el comedor se encuentran unos gorritos muy coloridos y en la sala están todos los invitados.
Sé que todo esto es complicado para Ethan, lo tengo muy presente, pero quiero que con esta "mini fiesta", reviva ese espíritu que ha muerto. Que el tema de los cumpleaños sea algo divertido y no un motivo más para pensar en todas las desgracias vividas.
Salgo de la casa y me dirijo al parque donde me debo encontrar con él. Está más arreglado de lo que él podría admitir en toda la tarde, tiene una vestimenta completamente negra, pero hoy lleva un poco de gel en el cabello, dándole un toque diferente. Un detalle más para la nueva lista de cosas que me agradan de Ethan.
- Heey, lamento interrumpir, ¿vas a encontrarte con alguien?
Puedo ver una pequeña sonrisa asomándose por su rostro, pero rápidamente vuelve a la cara de poker y acomoda sus manos por encima de sus ojos, intentando cubrir el sol inexistente. Prácticamente está nublado.
- En realidad, estoy esperando a una chica linda. ¿Ves a alguna por aquí?- Mira hacia su alrededor, en busca de alguien y, como si hubiera fallado, vuelve a posarse en mí.
¿Gracias?
- Lamento informarte que no hay ninguna por este sitio. Solo yo- Levanta una ceja y mueve su cabeza en un gesto de desaprobación.
- No lo creo, no noto a ninguna.
Su sonrisa crece en un instante, y yo solamente puedo negar con la cabeza. Me cruzo de brazos y levanto mi mentón, en un intento de verme intimidante, estando lo más erguida y firme posible.
- Tampoco veo a chicos lindos por aquí, creo que iré a buscar por otro lado- Abre su boca y acomoda su mano derecha sobre su pecho como si le hubiera herido el orgullo, pero vuelve a atacar. O eso creo.
- ¡Espera! Tienes algo en tu nariz- Rápidamente me froto la mano sobre esta, pero Ethan agarra mi brazo en un abrir y cerrar de ojos, y me atrae hacia él. Con su mano libre mantiene segura a mi cintura y con su dedo índice toca mi nariz-. Te encontré.
Muevo los brazos saliendo de su amarre y frunzo el ceño.
- Heey, no me vuelvas a engañar. Además, sigo creyendo que no eres guapo- Me cruzo de brazos y entrecierro los ojos. Me agrada que, a pesar de saber la razón por la que está aquí, no se ve afectado-. Te perdono solamente porque es tu cumpleaños y por eso...
Meto las manos en mis bolsillos, agarro mucho confeti (que recolecté yo misma, dejándolo en mis pantalones con el fin de estar preparada en cualquier momento) y extiendo los brazos, creando una lluvia de colores.
- ¡¡Feliz cumpleaños!!- grito mientras, inesperadamente, Ethan me envuelve entre sus brazos.
- Gracias, Meg. Pero antes te quiero hacer una advertencia. Te conozco y sé que planeaste algo grande, sin embargo, te recuerdo que yo no quiero nada de eso.
- No te preocupes. Solo promete que vas a divertirte- Me regala una mueca que, supongo, es un intento de sonrisa, y unas palabras que me dieron la señal de que ya era hora de llevarlo a mi casa.
- Lo intentaré.
Enseguida salimos del parque, coloqué sobre sus ojos una venda, para que no sepa a dónde nos dirigimos. Y también para darle un toque de suspenso a la situación. ¿Qué puedo decir? Me gusta mucho ver películas, y las ideas surgen de allí.
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La persona correcta en el momento perfecto
RomanceUn chico roto con el alma pérdida. Una chica con un pasado que la persigue. Dos almas destinadas a encontrarse. Ethan Hale no ha tenido una vida fácil. Lidiar con diferentes traumas que han ido marcando y sentenciado su camino, es una tarea complica...