Jelsa one-shots

Day 27: On One of Their Birthdays

Elsa acomodó con sumo cuidado el letrero de Happy Birthday con tipografía que ella mismo realizó a mano alzada con chocolate liquido blanco sobre una plaquita de chocolate en el centro del pastel, con la manga pastelera comenzó a rellenar los espacios vacíos con betún, tomó las fresas que faltaban y las distribuyó de forma estética alrededor de la plaquita para finalizar poniendo las dieciocho velitas de cumpleaños.

–¡Se ve bien, Elsa!– ella casi se desmaya al ver a Kristoff entrar a la cocina con esas cajas de refrescos acercándose a su pastel.

–No, no, no– Ella lo desvió haciendo que se diera un cuarto de vuelta –Esas van por allá, no quiero nada sobre esta mesa.

–Relájate, Els– le pidió el rubio al dejar las cosas donde ella le había dicho –Pase lo que pase, Jack estará muy feliz con esta fiesta, sobre todo porque viene de ti– le dijo con tono sugestivo.

–No es suficiente– dijo Elsa estando estresada –Tiene que ser perfecto– su tono era de preocupación.

Kristoff arqueó una ceja –¿Por qué?–

–Porque este es el último cumpleaños que pasaré-que pasaremos con Jack antes de que se vaya a la universidad al otro lado del país– explicó.

Kristoff asintió –Aun así, Jack vendrá para vacaciones–

–No es lo mismo, no será lo mismo– murmuró con tristeza dirigiéndose a la puerta de la cocina –Kristoff, no quiero que nada le pase a ese pastel, por favor– suplicó mirándolo.

El rubio asintió –Déjamelo a mi–

Al dejar la cocina y llegar a la sala se encontró con Anna, Rapunzel y Eugene decorando el lugar con calma.

–Chicos– ella jadeó viendo el reloj –Hipo y Astrid traerán a Jack en una hora, tenemos que terminar esto pronto– se apresuró a tomar un globo y empezar a inflarlo con la máquina de helio y atarlo con un hilo para colocarlo en un lugar específico.

–No te preocupes, Elsa, déjamelo a mi– dijo una voz chillona.

Ella se giró para ver a Eugene cerca del tanque de helio –Ay no...– se frotó la frente con fastidio.

–You fill up my senses

Like a night in a forest

Like the mountains in springtime

Like a walk in the rain...– Elsa lo silenció con una mano en la boca de él.

–Yuyin– le advirtió señalándolo.

–Yo me encargo de regañarlo– se ofreció Rapunzel poniéndose de pie para acercase a su novio.

–Perfecto– Elsa decidió enfocarse en otra cosa –Anna, ¿me ayudarías a colocar el letrero?– le pidió a su hermana menor.

–Por supuesto– ambas subieron la respectiva escalera para colocar la pancarta.

–¿Se ve bien ahí?– le peguntó Elsa a su prima.

–Mhhh, muévela más arriba Anna– señaló.

La pelirroja obedeció –Si, está bien, pueden fijarla–

Anna tomó un pedazo de cinta para fijarlo a la pared lográndolo –Ahí va la cinta– lanzó por los aires el rollo de cinta hacia Elsa quien intentó atraparlo, pero solo terminó fallando y de paso comenzó a tambalearse sobre la escalera amenazando con caerse.

–¡Elsa!– Eugene logró atrapara antes de que la rubia pudiera tocar el suelo, desafortunadamente, en su desesperación de sujetarse de algo, terminó tomando el letrero y arrastrándolo con ella dejándolo inservible.

–No– gimió al ver los pedazos del letrero en sus manos y en el suelo.

En eso la puerta de la entrada de abrió de golpe revelando a un estresado Jack –¡No, no voy a pasar mi cumpleaños otro minuto más en el estúpido IHop, llevábamos ahí tres horas!– exclamó visiblemente molesto hasta que vio a Elsa en brazos de Eugene y el resto del escenario.

Anna se apresuró y corrió a la mesa para tomar el cañón de confeti –¡Sorpresa!– gritó accionándolo, para su mala suerte tuvo mala puntería y le dio directo en el rostro a Jack, también para su mala suerte, ese no había sido un cañón de confeti.

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–De verdad lo siento– se disculpó Elsa por milésima vez con Jack quien intentaba quitarse la pintura rosada del rostro.

–Está bien, en serio– le sonrió –No fue tú culpa–

–Claro que lo fue, yo les pedí que te llevaran a ese estúpido IHop, yo fui la que rompió la pancarta y la que se equivocó al comprar el cañón de confeti confundiéndolo con un cañón de revelación de sexo de bebe.

Jack se rio –Bueno, me gusta pensar que es una revelación de sexo adelantada– bromeó –Tal vez en un futuro si tenga una niña– se encogió de hombros.

–Quería que tuvieras un buen cumpleaños– suspiró derrotada –Y lo arruiné todo, como siempre–

Jack la tomó del brazo para atraerla a él –No arruinaste nada– la calmó –Te tomaste todas estas molestias por mi... y la fiesta sigue en pie, la comida está intacta y ustedes están aquí, no puedo pedir más–

–Oh, yo puedo apostar que si hay algo más genial que eso– dijo la voz de Kristoff quien salía de la cocina con el pastel –Mira este asombroso pastel que te hizo Elsa, nadie le hace algo así a nadie si no le importara tanto– se acercó a ellos con torpeza.

–No, no, no, no– lo frenaron los chicos.

–Es un bello pastel– dijo Jack –¿Por qué mejor no lo llevas con CUIDADO a la sala?, no queremos que más cosas exploten hoy– dijo dirigiendo a su amigo a la sala.

Elsa soltó un suspiro de alivio.

–Sabes, Kristoff tiene razón... nadie se toma tantas molestias por alguien quien no le importe tanto... debo de importarte mucho–se acercó a ella con una sonrisa.

–E-eres mi amigo– respondió con timidez.

Jack sonrió –Ya sé que pedir de deseo de cumpleaños–

Ella arqueó una ceja.

–Es algo que solo tú puedes darme– susurró estando a escasos centímetros de sus labios.