Equipo de Investigación Digimon

Sátira #19

Estiércol recién salido del horno para pagar el alquiler.

¿Os acordáis de los Numemon sin hogar? Con la de veces que lo he repetido es normal que sí, aunque estéis hasta las narices de este osete... Me congratula anunciar que finalmente han encontrado uno de la forma más inesperada: han sido contratados por Kuzuhamon para trabajar en la floristería, ayudando con el fertilizante destinado a sus flores y no hablo de las empleadas Alraumon.

Hacía unas semanas, las Digimon mencionadas nos hablaron de soslayo sobre el fétido olor que provenía del sótano del establecimiento, sin ser conscientes de que estaba siendo habitado por las mismísimas babosas. Al parecer, después de unas arduas negociaciones, el activista Nanimon alcanzó un acuerdo con la dueña de la floristería, consiguiéndoles un hogar a cambio de trabajo.

Los jugadores del videojuego Digimon World recolectan todas las cacas de su partida esperando poder sacarle un beneficio económico.

Mientras los Numemon disfrutan del húmedo y oscuro sótano del local, alimentándose de la basura sobrante, sus heces son utilizadas como fertilizantes para las nuevas flores. De esta forma Kuzuhamon habría conseguido abaratar los costes de producción y conseguir mayores beneficios.

«Cuando contactaron conmigo pensé "¡Mierda, Numemon!" y entonces algo se iluminó en mi cabeza, ¡eso es justo lo que necesitaba! ¡Mierda! Y qué acierto, ya que ofrecen un producto de primera calidad.»

Kuzuhamon

Por escatológico que suene, los resultados saltan a la vista y es que el número de ventas se disparó en el mes de febrero, sin tener relación alguna con San Valentín. ¿Quién les iba a decir a las babosas que su cualidad más desagradable iba a ser su mayor atractivo? Desde luego, una vez más, Kuzuhamon ha demostrado su buen ojo como empresaria al ver oportunidades donde nadie más es capaz.