CAPÍTULO 26

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CAPÍTULO 26



[¡WOOW!]

[Por el amor de Dios, no estoy soñando, ¿verdad?, es un humano, un humano vivo]

He Xile nunca pensó que lo primero que dirían cuando se quitara la máscara sería algo tan obvio. Dejó escapar una carcajada, sus ojos se curvaron en forma de luna creciente, y asintió con la cabeza —Sí, estoy vivo.

[Mierda, estaba un poco cabreado y quería decir algo sobre ese tipo molesto, pero luego pensé que si Black no lo hubiera provocado, el presentador podría no haberse quitado la máscara, ahora estoy en un dilema]

[Es Lan Lan]

[Lan Lan está vivo]

[No dire nada más, solo ¡hago clic como un loco! A partir de ahora, el canal de Lan Lan será mi hogar permanente]

[El tipo de antes, ahora sabes por qué Lan Lan actuaba así, es su primera vez en el Festival de las Olas y no sabe nada de ello. La próxima vez que navegues, por favor, no hagas daño a la gente cuando no sepas la verdad, ¿vale?]

[Supongo que ahora se arrepiente de lo que dijo, ya no ha vuelto a aparecer]

[En el Festival de las Olas pasan muchas cosas, cada año es diferente, no sabemos qué habrá este año, tendremos que esperar a que empiece y abrir el mapa de la playa e ir allí para saberlo]

[¡Si no tienes miedo al agua, será divertido!]

He Xile lo estaba deseando.

¿A quién no le gustaría jugar en el agua?

Mientras charlaba, el número de espectadores en la esquina superior derecha se disparó a tres cifras, luego a cuatro, y finalmente, como si fuera un cohete los números apenas se detienen.

Era la primera vez que He Xile veía un espectáculo así.

Además, la gente iba y venía sin control.

He Xiluo susurró —Oh bueno... me pondré la máscara.

Tan pronto como salieron esas palabras, la gente que estaba viendo la transmisión en vivo gritó instantáneamente.

[¡No! aaaaaaaah]

[¡Oooooh, nooo! Lan Lan, no sabes, desde que te mudaste del museo a vivir en el Palacio, hace mucho tiempo que no te veo, ahora es tan difícil verte, no te pongas la máscara]

[No uses una máscara. Hablando de eso, ¿cómo has estado en el palacio?]

[Lan Lan, Su Majestad no aprovechó la oportunidad para intimidarte, ¿verdad?]

—Espérenme.

Mientras se ponía la máscara, apagó la emisión en directo y cambió rápidamente de posición desde la calle de los bocadillos.

Mientras se alejaba, He Xile aún podía ver a la gente apresurándose hacia donde se encontraba no hacía mucho. Obviamente muchos habían visto la emisión en directo e identificado su ubicación, por lo que entraron dispuestos a buscarle directamente en StarNet.

He Xile llegó a una cafetería bastante bien decorada y activó el modo de privacidad, antes de volver a encender la transmisión en directo.

Al quitarse la máscara y ver el número de personas en línea, He Xile comenzó a responder a las preguntas con seriedad.

EL ÚLTIMO HUMANO DEL IMPERIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora