Rumores [+18]

28. ¿Celos?

Como ya conocemos el rumor. El cerebro libera reacciones las cuales provocan que, incremente la complicidad, confianza y afecto entre ambos. Y eso puede llevar a sentir celos.

Ahora caminábamos por el estacionamiento, Emma, Luca y yo, los demás, o tenían clase, o cosas que hacer. Hablábamos justo cuando un chico se nos acercó.

― Aquí tienes.

― Eres un idiota, joder, que bien. ―revisó los papeles que tenía.

― ¿Yo idiota? ―el chico se me hacía conocido.

― Sí, pero ahora agradezco al idiota. ―analicé su rostro, pero no lo recordaba.

― Eres una malcriada, y me deberás una. ―yo lo conocía.

― Mira idiota, nada de esto habría pasado. . . ―dejando su pelea, fui donde Luca para preguntar:

― ¿Quién es?

― Hermano de Emma. ―eso no ayudó mucho, lo vi mal.

― ¿Cómo se llama? ―no recuerdo mucho, pero sé que lo conozco.

― ¿Por qué lo preguntas? ―rodando los ojos, esperé a que diga su nombre sin dar explicaciones―. Adrián. ―tampoco me sonaba su nombre.

Cuando terminaron de pelear se acercaron, lo conozco, pero no tengo ni idea de donde o por qué.

― Amunet Dumas. ―y me conoce, eso hace más claro que tengo que recordar algo.

― ¿Se conocen? ―preguntó entonces Emma.

― En una fiesta, en Londres ―no, no suelo ir a fiestas―. O bueno en un pub. ―eso es más creíble, y posiblemente sea así, es la forma que uso para conocer y divertirme.

Sentí como el cuerpo de Luca se apegaba más a mí, yo trataba de recordarlo, pero se me hacía imposible, y el nombre no importaba nada.

― Fue a principios de año, ya hace tiempo. ―tratando de rememorar todo, al fin pude recordarlo.

― Claro, derramaste tu bebida en mí. ―la imagen vino a mi cabeza.

― Una forma de poder entablar una conversación. ―enarcando una ceja crucé mis brazos.

― Vaya forma de flirtear.

― ¿Qué hubo entre ustedes? ―la voz de Luca hizo que voltee a verlo.

― Luca. ―susurré con advertencia.

― Hablamos, una gran compañía. Pero, algo curioso. No me dejaste tu número.

― Es algo que le gusta hacer. ―juro que, si el capullo que tengo a un lado no calla, le cortaré la lengua.

― ¿Vas de salida?, podemos ir a tomar algo. ―sentí su mano ir a mi cintura para sostenerme con posesividad.

― No, perdona, tengo cosas que hacer. Pero fue un placer volver a verte. ―lo quité alejándome un poco.

― Sí, tenemos cosas que hacer. ―lo miré mal, ¿qué le sucede?

― Se me olvidó que tengo que mostrarte algo. Sígueme. ―Emma se llevó a su hermano.

― Nos vemos, espero verte pronto. Podrías darme tu número.

― Ya veremos eso, adiós, chicos. ―ambos se fueron a ver lo de mi amiga.

Esperé a verlos lo suficientemente lejos, mirando a los lados, me aseguré a que nadie esté cerca. Ahí fue donde inicié, donde yo ordené mis palabras para decirlo.