Capítulo 42. No cuela, chaval.

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No sabía en qué plan iba a ir Gavi y eso me asustaba. Yo sólo quería que nos lleváramos bien e intentáramos llevar la situación lo mejor posible sin que ninguno de los dos estuviéramos incómodos. 

-Siéntate -ordené una vez terminé de organizar el armario. 

Él hizo caso y se posicionó frente a mí sentado en la cama. 

Yo cogí la silla del escritorio y me senté también. 

-¿Qué tenemos que hacer? -me interesé. 

-Pues como si fuéramos novios, tampoco es tan difícil, ya lo hemos hecho antes -dijo tranquilo. 

Rodé los ojos y negué con la cabeza. 

-Si sale igual que antes nos van a pillar antes de que empecemos con ello -murmuré. 

Él se incorporó un poco hacia delante y me observó. 

-Dime qué tengo que hacer, y nos limitaremos a eso -pedí seria. 

-Espera, David me dijo que lo llamara para que nos lo explicara -recordó sacando el móvil. 

Yo asentí. Me fiaba más de su representante, así que preferí que nos guiara él. 

Gavi puso el altavoz. 

-Hola, David -saludó cuando éste descolgó-. Estoy ya con Dani, dinos qué hacemos. 

-Hola, vale, genial -contestó como aliviado-. Vamos a ver, no va a ser difícil, pero tenéis que tener mucho cuidado -comenzó a decir-. ¿Dani me está escuchando? -se interesó. 

-Sí, estoy aquí -contesté. 

-Bien, pues escúchame atentamente -pidió-. Ya sé que es una situación complicada, sobre todo para ti, pero vais a tener que dejar vuestras diferencias a un lado si queréis que esto salga bien -continuó. 

-Si con diferencias te refieres a sus mentiras, me parece bien -dije irónica y Gavi negó con la cabeza. 

-Bien. Lo que tenéis que hacer es básicamente comportaros como si fuerais novios, pon los límites que quieras, porque Gavi ya me ha dicho que ibas a hacerlo, pero tiene que cuadrar con lo que haría cualquier pareja -explicó después. 

Yo asentí. 

-¿Tienes coche? -se interesó. 

-Sí -contesté confusa. 

-Genial, pues lo llevarás al entrenamiento de mañana, y algún día más, sobre todo estos primeros para que la gente os vaya viendo -indicó-. Irás a los partidos, y bajarás a los pasillos cuando acaben haciendo como si fuerais una parejita de lo más feliz -ironizó. 

-Genial, nada más lejos de la realidad -dije también irónica. 

Entonces me acordé de una cosa. 

-¿Tendré que ir a la entrega de los premios a los que está nominado? -me interesé. 

Gavi me miró sorprendido y yo esperé la respuesta que deseaba. 

-Eso será decisión tuya -contestó. 

Esa era la respuesta que deseaba. 

-Perfecto -contesté un poco animada, mientras Gavi se ponía serio. 

-Lo de los besos, y demás os lo dejo a vosotros, pero no seas demasiado estricta, ya sabes que la gente quiere ver lo que quiere ver -habló de nuevo, y yo asentí. 

-¿Hay algo más que deba saber? -pregunté con miedo a la respuesta. 

-Creo que no, os mantendré informados de cómo vaya la situación, y según eso cambiaremos algunas cosas o veremos lo que hacemos -contestó tranquilo. 

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