INOCENCIA INTERRUMPIDA(COMPLETA)

~78~

¡Al final!

- Estoy agotada, se me cierran los ojos, y ni siquera ha llegado la hora de la cena, que triste.

- ¡Mamaaaaaa!

Cierro los ojos derrotada, masajenadome las sienes.

- ¡Mamaaaaaaaaaaa!

Abro los ojos, veo a la pequeña diablito aparecer frente a mi, con sus bracitos cruzados, esos ojos azules que me penetran el alma, el cabello negro lacio, atado en una coleta alta desprolija, con mil mechones cayendo por todo su rostro, esas cejas espesas y esa carita tensa digna hija de Eaton.

Estira un brazo hacia la izquierda apuntando hacia algo.

- ¡Alana acaba de romperle el cuello a mi pobre muñeca! ¡Es nueva! ¡regañala!- exige mientras escucho el llanto de Alana.

Suelto una bocanada de aire. De pronto Sean aparece con Alana en los brazos, se ha calmado un poco pero sigue sollozando. Rosie la mira mal y yo los miró a los tres deseando enterrarme en el sofá. Menos mal mi príncipe, Santi está dormido en mi regazo.

- ¿Qué pasó Sean?- pregunto mirándolo, Rosie me lanza una mirada juzgadora con sus cejas ceñidas.

- Alana y Rosie jugaban a las muñecas, pero Alana comenzó a mordisquear a la muñeca y le rompio la cabeza, Rosie se enojo, le grito y vino hasta aquí molesta- explicó el sobrio meneando a Alana.

- ¡LA ASESINÓ MAMÁ! - chilla Rosie molesta, con ese grito Santi se remueve.

Oh no. Peligro.

Entonces lanza el chillido del año. Llorando en mi regazo.

Suspiro. Quiero llorar con ellos, entonces la puerta se abre. Rosie abre bien los ojos y corre hasta él. Escucho los gritos de Rosie poniéndole queja.

- No llores amor, mami esta aqui- enseguida mi Santi se queda callado pero despierto. Me levanto del sofá, beso la frente de Alana y deja de sollozar.

- Tranquila mi pequeña, ya se le pasara a Rosie - le digo apretujando su mejilla regordeta. Sean solo me mira sonriendo.

Veo que Rosie jala por la mano a Eaton, y el al entrar a la sala ve mi rostro, rápidamente me comprende el gesto. Se detiene de golpe.

- ¡Papi! No te detengas, Alana...

- Rosie, escúchame- pide el y Rosie se queda callada, frente a él. Todavía molesta.

- Eres una niña grande, ya tienes seis años. Alana es una bebé de dos años, no lo hizo con consentimiento, tu hacías lo mismo a  esa edad. Pero eras solo tu, ahora tienes dos hermanitos pequeños. No me gusta que reacciones así, que le grites a tus hermanos o a mamá. No es correcto, tienes muchas muñecas, no puedes ser egoísta y no puedes ponerte así, entiendo que te pongas triste pero tienes que controlarte. Claro, a Alana y Santiago tambien se les corregirá amor, ellos irán entendiendo en la medida que crezcan- dice el con el tono muy suave. Parece funcionar, Rosie suaviza su rostro un poco avergonzada.

- Perdón papi- dice ella.

- Te amo cielo, pero tienes que pedirle disculpas a mamá por gritarle como le gritaste y a Alana, es una bebé mi amor.