INOCENCIA INTERRUMPIDA(COMPLETA)

~11~(parte dos)

CONFESIONES, LA ROSA Y EL BESO.
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- Y es que sus palabras me convencieron hasta que la realidad me pegó sin avisar.
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Estaba perpleja por lo que Eaton me estaba diciendo. Jamás imagine algo así. Para comenzar yo no er bella, segundo no podía pensar que el pasara desapercibido en la iglesia.

- Yo no...yo no...es decir...ehh...

- Déjame terminar- me interrumpio. Yo asentí, estaba muy nerviosa como es usual cuando estoy cerca de él.

- Cuando ibas de salida, un señora te tomó el brazo y te llevo con ella nuevamente al asiento donde estabas. Me quede observándote otro momento más; hasta que ya no pude seguir ahí. Salí de ese lugar, pensando.. le di vueltas días y noches. El trabajo que tenía que hacer, ya no lo hice. No podía sacarte de mi cabeza, así que días después regrese a la iglesia donde te había visto, esperé un buen tiempo, luego te vi salir con una señora y un niño. Al verte no podía dejar de admirarte. Te mirabas tan inocente y tan pequeña, que de pronto quise tenerte. Es por eso que decidí encontrarte. Y le dije a mis hombres que te siguieran por un tiempo.

Realmente no sabia que decirle, estar viendo sus ojos intensos y escuchando su confesión sin una gota de culpa me hela los pelos del cuello. Es tan guapo pero aterrador

- Ellos averiguaron todo sobre ti, como te llamabas, que hacías, y conocí toda tu vida, hasta ese día que te encontré en la esquina, no planeaba presentarme así a ti; pero verte en ese vestido tan lejano a lo que tú usabas, maquillada, mas bella que de costumbre.
Hice lo que sentí y te encontré en esa esquina, hermosa, pero vi el miedo en tus ojos,  no me importo, sé que no fue correcto lo que hice, ni la manera en que te traté después, pero Alison, tu me gustas, se que me consideras un tirano, un asesino, un hombre malo, bueno lo soy, mi vida no vale la pena, pero tu le podrías dar sentido a todo, porque por ti haria cualquier cosa- finalizó. Todo su cuerpo estaba tenso, sus palabras fueron firmes. Trague grueso saliva.

No sabía que decirle, sus palabras eran sinceras, lo sentía. Pero todo era tan complicado, tan raro, jamás me imagine en una situación así.

- Eaton no sé que decir, yo... sabes todo de mi, sin yo haber tenido la oportunidad de contártelo, sabes entonces que mi vida es aburrida, caótica, y que lo uno que me salva es David, es mi mayor tesoro. Tu haces cosas con las que jamás podría estar cómoda ni mucho menos de acuerdo, tu matas, obligas a las personas a sabe Dios que cosas. Yo jamás sería feliz contigo- dije sinceramente.

- Lo sé. Y creí por un momento que podía lograrlo contigo, pero ahora se que no es así, solo quiero que me perdones por invadir tu vida privada, por haberte engañado, soy esto Alison, soy una persona oscura-. Al menos nunca me ha mentido, tampoco ha revelado que es lo que hace exactamente pero nunca me ha mentido.

Se levantó del sofá, podría decir que nervios, así que hice lo mismo.

- Me voy, y te prometo que no volveré a molestarte, ni mis chicos, ni James, ni nadie. Dejaremos que tu vida siga su curso, lejos de una desdicha como yo-. No era lo que él queria, podia verlo en sus ojos. Cuando se dio la vuelta para irse dije la mayor tontera del mundo.

-Tu deseo–.

Okay Alison, deseas a este hombre malo.

- ¿Perdón?- se detuvo, volvió a verme.

- ¿Qué fue lo que pediste cuando estabas en la iglesia? - pregunte ansiosa. El desvió la mirada y tomó un respiro. Luego me miró.

- Lo que todos pedimos alguna vez en nuestra vida- respondió.