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¿SE ACABO?

subimos a su auto. Sorpresivamente el lo manejaba. Yo iba de copiloto, en ningún momento cruzamos palabra, el silencio nos consumía, yo estaba demasiado nerviosa, mi cabeza pensaba en todo y en nada, además tenía náuseas, solo pedía no vómitar, le pedí a mi bebé que me ayudara en ese momento a estar quietecito.

Eaton manejo un buen rato. Luego entro a un edificio. Suspiré. Íbamos hacia el apartamento donde estuvimos cuando ese desgraciado me drogo. Bajamos del auto en silencio, subimos por el ascensor  había una tensión rara entre nosotros, yo estaba muy nerviosa. Salimos del ascensor, Eaton abrió la puerta.

- Adelante- dijo el. Pase a su lado, inmediatamente pude sentir el aroma a humo de cigarrillo, su perfume, su aroma estaba impregnado por todo el lugar. Entonces note el desorden en el apartamento cuando Eaton encendió la luz.

Habían sobras de comida sobre la mesita del centro, botellas de alcohol sobre el sofá y piso, sábanas, ropa, colillas de cigarrillos por todos lados. Entonces entendí que había estado viviendo ahí.

- Lo siento, siento mucho el desorden, he estado viviendo aquí, puedes sentarte ¿Quieres algo de tomar?- pregunto alejándose de mi, tratando de hacer espacio en el sofa. Yo estaba muerta en nervios, tensa. Me acerqué para sentarme abrazada a mi misma, tenía frío, no se si era por los nervios o por el bebé, pero estaba muy fría.

Eaton desapareció unos segundos, luego volvió del pasillo con una sudadera negra.

- Toma, estas temblando de frío, pontelo- lo tomé entre mis manos y me lo coloque, Dios mío, olía a su perfume, luche por no olisquiarlo hasta quedarme borracha por su olor.

Eaton se sentó en el otro sofá, frente a mi, me miraba muy serio, estaba más nerviosa, jugaba con sus manos, yo solo podía mirar su tatuaje de la rosa.

- ¿Como haz estado?- pregunte para romper el hielo, la tensión crecía.

- Bien- contesto, frío muy frío.

- Que bueno.

- Si.

Silencio, maldito silencio. Comencé a morderme el labio inferior, moviendo mi pierna de arriba hacia abajo.

- Emmm ¿Com...

- Alison, vamos al punto- me interrumpió.

- Quiero saber como esta mi hijo ¿Haz ido al doctor?

- Eh, si. Hace unos días tuve la cita. Estoy bien, bueno el bebé, tengo un mes y medio, el bebé tiene 4 milímetros de grande ¿Puedes creerlo? Es una semillita, estoy tomando B12 y ácido folículo, para ayudarme con todos los cambios y lo que el bebé necesita.

Sonreí, pero Eaton siguió serio. No podía leer su mirada, me lo hacia difícil.

- Bien. Alison he estado pensado mucho, y creo que debes volver a la mansión, ahí te cuidaran, tendrás todas las comodidades, además, pagaré todo lo médico.

INOCENCIA INTERRUMPIDA(COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora