INOCENCIA INTERRUMPIDA(COMPLETA)

~10~

ROBO.
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La verdad ya no es tan clara hoy. Siempre negué amarlo, me perdí en los ojos azules equivocados. Lo ame, tal vez, puede ser... pero mi verdadero amor fue él.

~Extracto del diario de Alison.
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- ¡Ali!... Ali! ... Alison!- gritó Lourdes.

- Qué? ¿Qué pasa?- pregunte asustada. Ella me miró sería, con su dedo señaló de arriba hacia abajo apuntándome.

- Hace 10 minutos se derritió tu helado en tu mano y vestido- dijo.  Mire mi mano y mi vestido, era un desastre. Soy una torpe. Lo tiré y traté de limpiarme.

- ¿Hasta cuando vas a seguir igual? Llevas dos semanas así, ida, pensativa. Amiga aunque no lo aceptes, ese hombre te cambio- dijo.

- Otra vez con lo mismo Lu. Ya te dije que ese tema está olvidado- respondí tratando de quitar la mancha de mi vestido.

- Sabes que Alison, cuando seas honesta contigo primero y luego conmigo, me avisas ¿okay? No eres la misma todo el tiempo tienes esa mirada extraña como si te fueras de este mundo, acabas de reprobar química ¡Química! La reina de las fórmulas... Ali, solo dilo- pidió ella con desespero.

- Decir que Lu. No tengo nada que decir—. Puse los ojos en blanco.

- Conozco esa mirada Lu...

- Hasta que no lo aceptes y no lo digas, no tendrás paz- dijo y Justo en ese momento sonó el timbre. Teníamos que regresas a clases.

Iba de regreso a casa, Lu se enojo conmigo, no quiso acompañarme. Tenía razón, yo ya no podía ser igual, creí que Eaton me buscaría y me daba miedo, pero no lo hizo. Tampoco lo hizo James. Que estoy pensando? No tienen porque buscarme, ya paso. Debo vivir mi vida- pensé.

- Hola mamá.

- Al fin llegas niña, se me hace tarde para el turno. Tengo horas extras hoy. No me esperes despierta- dijo mamá tomando sus cosas. Ella trabajaba en un restaurante que estaba abierto las 24 horas, trabajaba por las tardes y noches, cuando llegaba del colegio ella se iba. Yo cuidaba a David.

- ¿No dices nada?- preguntó mientras se colocaba labial rojo mirándose en su pequeño espejo dorado.

- No, ¿donde está David?- pregunte.

- Supongo que en su habitación, me voy, cuídalo muy bien, ah y por favor Alison, aviva de una buena vez- frunci el ceño. No entendí porque me lo dijo, mamá era así, lanzaba esas frases hirientes.

Subí a la habitación de David, estaba dormido. Sonreí al verlo, mi hermano era mi todo, le había ayudado mucho la terapia,  pero mamá ya no pudo pagarlo y lo saco. Necesito encontrar una manera de ayudarlo, necesito buscar un trabajo para ayudarlo, darle la mejor atención.
No se parecía mucho a mi, somos medios hermanos, pero para mi era más que eso. Su papá no lo quiso y mamá... a veces dudo que lo quiera aunque ella diga que lo ama.  Salí de la habitación y me dirigí a la mía. Tomaría un baño rápido y me pondría cómoda. Entre a la habitación me quede parada en la puerta, observé todo el cuarto, había un aroma diferente... habían algunas cosas mal ubicadas. Yo soy muy ordenada, alguien estuvo en mi habitación ¿mamá? Pero ella a penas entraba, ese aroma...pareciera a.. no, estoy loca. Sacudí la cabeza. Creo que realmente estoy perdiendo la cabeza.

Admitirlo Alison, lo extrañas.

Tomé un baño, me puse ropa comoda. Un camison celeste un poco corto, liso, trence y trence mi cabello.