Tu Pueblo

124 18 33
                                    

Cómo la mejor escena romántica, Loki me recibe en la caballeriza con un colorido ramo de flores

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cómo la mejor escena romántica, Loki me recibe en la caballeriza con un colorido ramo de flores. Sé que hace un esfuerzo tremendo, es justa la recompensa.

—Ya estás de regreso, querida. —Su sonrisa es divina.

—¡Loki! Salto de Sleipnir prácticamente a sus brazos.

—Cuidado, no te lastimes. —la atención sobre mí es idílica y realmente encantadora.

Cojo el ramo, huele a mil delicias.

—Gracias, es precioso. —Nos besamos con mucho cariño.

—Volkyr, gracias por traer de vuelta a la Princesa sana y salva. Espero que Sleipnir se haya portado bien.

—Alteza, es cierto que es la futura Princesa de mi amado pueblo, pero Iris para mí es cómo una hermana, la protegería si me fuera la vida en ello de cualquier cosa o persona que la lastime. —Abro los ojos.

—¿Es una amenaza? —Siento que la bonita velada se está desmoronando por segundos.

—No, tómelo cómo una declaración de intenciones. Cuando ella tenía seis añitos y sufrió el ataque de un soldado... Juré protegerla aunque me fuera la vida en ello, y, las promesas hay que hacerlas valer. —la mirada de Loki se posa sobre mí y me hago muy pequeña.

—¿Nos vamos? —Agarro a Loki fuerte. —Volkyr, nos vemos pronto, gracias por el paseo.

—Hasta pronto Iris.

Mientras nos alejamos de la caballeriza, la respiración intensa del Dios me pone nerviosa. Apenas hemos doblado la esquina y me acorrala contra la pared.

—Dime qué ha sido eso.

—No sé a qué te refieres.

—¡Vamos, Iris! Puedes hacerlo mejor. —responde molesto.

—Volkyr siempre me ha protegido.

—Ahora estoy yo. Me da igual que comieras mocos con él. Si vuelve a dirigirse a mí en esos términos, lo mandaré a las mazmorras. —sus celos me hacen gracia, su entrecejo es sexy.

—¿De qué demonios te ríes?

—De lo increíblemente guapo que estás cuando te enojas. —queda confundido.

—¿Qué?

—Bésame, mi Príncipe. —murmuro en su rostro.

—Estás demente. —contesta muy sexy.

—Me lo has pegado tú. —lo cojo de las solapas de la parte superior de cuero y lo atraigo hasta mis labios. La rabia de los celos corre por su saliva y me quema, combatiré su guerra aunque sea con amor.

Necesitamos respirar, me mira aterrado.

—¿En qué te has convertido? —Oqqhhh esa voz.

—En la Caperucita que el lobo feroz desea. —lo vuelvo a traer hacia mí, muerdo su labio y gimo en ellos.

💚𝑺𝒂𝒍𝒗𝒂𝒋𝒆 𝑨𝒎𝒂𝒛𝒐𝒏𝒂💚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora