💚𝑺𝒂𝒍𝒗𝒂𝒋𝒆 𝑨𝒎𝒂𝒛𝒐𝒏𝒂💚

Hasta el fin de la vida

Sigyn se tambalea, una mezcla de risas y lamentos embriaga el aire mientras Loki se apresura a ayudarla. Sus palabras, sin filtro por el estado de embriaguez, despiertan una incomodidad palpable.

-¿Qué narices...? -Loki interviene, pero no muestra intenciones de moderar su lengua. -¡No hace falta que vengas a salvarme, ya tienes a tu jodida Princesa! -su tono, cargado de acidez, hace que Loki me mire con una disculpa silenciosa.

-Ven, anda, te vas a caer. ¿Has bebido toda la barrica de licor? Madre mía, hueles a kilómetros. -intenta apaciguar la situación, pero Sigyn continúa sin filtro.

-Cuando hacías tus orgías en Palacio te encantaba beber así, hasta perder el sentido, y era yo la que te cuidaba. -las palabras de Sigyn perforan el aire.

-Por todos los Dioses, Sigyn, cállate o me vas a meter en problemas. -intento contener la situación mientras respiramos profundamente.

-¡Ahhhh! Es verdad, que desde que te enamoraste de Iris, dejaste atrás esas cosas. Mil perdones, Alteza. -un amargo suspiro escapa de mis labios mientras seguimos hacia la casa de Volkyr. -¡Hola Iris! No tengas en cuenta lo que he dicho. Es que a Loki le gustaba mucho follar y las mujeres, siempre ha sido un fornicador de la corte, pero contigo es un Santo. -sonríe con malicia mientras avanzamos. -Y te lo digo yo, que hasta el último día en Palacio, las doncellas lo agasajaban, pero él aguantó. ¡PALABRITA DE ODÍN!

Loki, agotado de cargar con más problemas, decide poner fin a la retahíla de palabras de Sigyn. Con rapidez, le tapa la boca, poniendo fin a sus revelaciones mientras avanzamos hacia el porche.

-¡Ey! A mí no me van los dominantes. -Sigyn intenta protestar.

-Pues a mí me gustan sumisas, así que cállate ya de una vez o tu futuro marido te mandará a la mierda. -Loki, con gesto cansado, la baja.

Volkyr sale a nuestro encuentro, me adelanto.

-Ha bebido un poco de más. Ten paciencia y sobre todo no hagas caso a las cosas que dice.

-Joder, Sigyn... -no me hace ni caso y va en busca de ella. -Vamos a casa.

-¿Necesitas ayuda? -pregunta Loki preocupado.

-¡DE TÍ NI AGUA! -medio grita Sigyn.

-Tengamos la fiesta en paz, por favor. Volkyr, nosotros cuatro dormiremos en mi casa, si necesitas algo... ya sabes dónde estamos.

Vemos cómo entran en casa y sé que Loki se siente mal.

-Tranquilo, mañana ni se acordará. -lo dejo tranquilo y voy hasta mí madre que parece estar atrapada por el atardecer.

-Mamá...

-Hija, mira qué bonito. -está emocionada.

-Sí lo es. Adoro los atardeceres.

-Yo también, dan paz.

-Tu hermana no volverá, Iris. -me mira a los ojos, tengo miedo, sé que puede haber algo sombrío en sus actuaciones, pero parece mi madre, cansada y arrugada, pero mi madre.

-Espero que al menos, mi madre siga conmigo. -cojo su mano. -Yo también soy tu hija.

Nuestras miradas brillan.

-Eres la Princesa del pueblo que amo. Además, casada con alguien que prendería el Universo por tí, con el que serás una estupenda madre... -mi corazón se acelera. -En cierta forma Loki me recuerda a tu padre. Siempre pendiente de mí y su familia por delante su bienestar.

-Mamá... -no quiero contener la emoción. -Padre llegará enseguida, yo también lo echo de menos.

Nos abrazamos sin dejar espacio para nada más.