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El gatito se retorcia en mis brazos mientras entre en la habitación. 'Meow Society' no era un lugar en el que pensé que entraría y, sin embargo, ahí estába, con un gatito que me estaba clavando las garras en las muñecas.

Había más gente de lo que pensé que habría. Sostenía a mi gatito contra mi pecho y miré a mi alrededor. Habian pequeños tazones alineados a lo largo de la pared, bolsas de comida para gatos en la mesa con notas que marcaban los diferentes sabores y para qué edad eran apropiadas. Habian algunos gatos que deambulaban libremente y otros, como yo, aún mantiamos a nuestros gatos cerca.

Una mujer con cabello oscuro atado en una cola de caballo apretada se me acercó con una sonrisa anormalmente grande y un gato gris esponjoso que parecía más enojado que cualquier otra cosa.

—Eres nueva -dijo ella- Nunca te había visto por aquí antes.

—Acabo de mudarme aquí desde Seúl -respondí y traté de no hacer una mueca cuando el gato me aruño el brazo- Este es Onyx.

—Onyx, bonito nombre -sonrío la mujer y levantó a su gato gruñón- Este es el Sr. Feliz.

Miré ante los ojos entrecerrados del gato, el gruñido que dejó escapar mientras lo sostenía lejos de su pecho. Parecia cualquier cosa menos feliz.

—Entonces ¿Qué hacen aquí? Soy nueva y pensé que podría beneficiarme de algunos amigos en el área pero... la verdad es que estoy fuera de mi elemento

—Bueno, los gatos son criaturas muy sociales -explicó alegremente la mujer- Es bueno para ellos reunirse con otros gatos y jugar con ellos. Por eso está esta sociedad. Además, es agradable encontrar personas con ideas afines, personas que estén tan locas por los gatos como tú.

Levanté la vista cuando me di cuenta de que Minho entró por la puerta.  Tenía tres gatos de alguna manera atados en su brazo. Cada gato tenía un collar de joyas de diferentes colores y, a diferencia de mi propio gato, parecían bastante contentos de acurrucarse en el pecho de Minho.

Cuanto más miraba, más me daba cuenta de que el propio Minho tenía rasgos felinos. La forma de sus ojos y rostro, incluso la forma elegante en que se comportaba. Si saltara de un edificio, probablemente aterrizaría perfectamente sobre sus pies.

Minho dejo a sus gatos en el suelo y parecían conocer el procedimiento de inmediato. Se deslizaron hacia los tazones y Minho saludo a algunas personas en su camino hacia el dispensador de agua en la esquina.

Justo cuando estaba tratando de pensar en una forma de acercarme a él, la mujer con la que estaba hablando de repente lo llamó.

—¡Minho! -ella gorjeo feliz- ¡Tenemos una novata!

Minho miro hacia arriba, abandonó el agua y se deslizó. Cuanto más se acerca, más parecía un gato. Piernas absurdamente largas, sus botas brillaban y vestía un suéter azul claro cubierto de pelo de gato. No pude evitar mirar un poco. Las tomas de la CTV de la policía no le hacían justicia, era majestuoso.

—Hola -Minho sonrío- Nunca te había visto por aquí.

—Ella es de Seúl -agregó amablemente la mujer con una gran sonrisa- ¡Igual que tú!

Una sonrisa irónica pinto las facciones de Minho. 

—Soy de Gimpo, noona -corrigió suavemente antes de girarse hacia mí- Lee Minho, ¿y tú eres?

—Tn -respondí automáticamente- Me acabo de mudar aquí. Yo y… -miré al gatito y los ojos de Minho también lo miraron.

—Tortoiseshell -comentó Minho mientras extendió su mano para acariciar suavemente el pelaje entre las orejas. Observé cómo el gatito se calmó de inmediato. Donde había estado arañando y retorciéndose contra mí, inmediatamente se relajo en el segundo en que Minho lo toco.

—Su nombre es Onyx -dije, no pude evitar sonreír. Estaba feliz de que el gatito ya no me rasguñara.

—Bonito nombre -comentó Minho y extendió su brazo- ¿Puedo?

Lo entregué con mucho gusto y parecía querer ir con Minho también. El se acurruco felizmente en su pecho y le maúllo. Prácticamente pude ver a Minho derritiéndose mientras lo miraba.

—No puede tener más de trece semanas -comento Minho, sus ágiles dedos movian suavemente al gatito mientras lo examina- Sin embargo, mira ese pelaje, brillante y hermoso, ¿Con qué estás alimentando a esta cosa?

—Solo la carne de gato normal -mentí y trate de recordar la última comida que compré. En realidad no lo había mirado, solo había cogido algo del estante que parecía vagamente apropiado- A el le gusta el pollo.

—Se nota -Minho se río y rasco detrás de las orejas de Onyx.

Observe y mientras lo hacía, las palabras de Toya resonaban en mi mente.

“Son peligrosos. Tienes que recordar eso, tenlo en cuenta siempre. Son peligrosos. La gente desaparece y no encontramos rastro, tiene que haber algo que les estén haciendo. Alimentar a los cerdos con sus huesos, una tina de ácido, lo que sea, no me extrañaría.  Especialmente de ese BangChan. No hay nada más allá de eso”

—Entonces, ¿qué te trae a Busan? -pregunto Minho, mucho más cálido con Onyx en sus brazos. 

El estaba ronroneando felizmente y no pude evitar sentirme un poco agria porque se encariñó con él inmediatamente después de pasar la última hora rascándolo en pedazos.

—Estoy cuidando a mi abuela -dije con una sonrisa brillante. Una historia de fondo cuidadosamente elaborada que había dicho tantas veces que la mentira se sentía verdadera- Está demasiado enferma para ir a Seúl, así que vine a Busan para cuidarla yo misma.

—Qué amable -dijo la mujer a mi lado.  Casi había olvidado que ella estaba ahí

—Y… bueno… no conozco a nadie aquí -me reí- El primer paso es mudarse, el segundo paso es conseguir un trabajo, deséenme suerte.

Era carnada. Solo un pequeño cebo tirado por ahí, pero note que algo parpadeo en los ojos de Minho. Él no dijo nada, ciertamente no me ofreció un trabajo en ese mismo momento, pero el cebo estába ahí y cambié rápidamente de tema cuando Onyx maúllo.

—Creo que podría tener hambre -dije y Minho me lo devuelve suavemente- Iré a buscarle algo de comer.

—Encantado de conocerte, Tn -sonrío Minho y, una vez más, no pude evitar notar cuán hermosos eran sus rasgos felinos. 

Era sorprendentemente bonito de la manera más extraña.

—Encantada de conocerte también -dije, de alguna manera logrando no tartamudear mientras me alejaba.

Sentí los ojos de Minho en mi nuca mientras me alejaba.

𝐆𝐨𝐝'𝐬 𝐌𝐞𝐧𝐮 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora