𝐆𝐨𝐝'𝐬 𝐌𝐞𝐧𝐮

•30•

HyunJin:

—Tengo un trabajo para ti.

Miro a Chan con desconfianza pero no hablo. Está bastante claro que Chan y Changbin conocen a Mogyul. Ninguno de los dos lo mencionó, sospecho que esto se debe a que Jisung les dijo que no lo hicieran, pero es obvio en la forma en que me miran. Como si estuvieran tratando de averiguar si todavía estoy de su lado.

Bien. Mantenlos adivinando.

—¿Solo?

Chan asiente.

—Hay un DJ de radio que se encarga del turno de la mañana -explica Chan- Y últimamente ha estado… cuestionando el liderazgo de mi padre.

Lucho por mantener una cara seria. Sé a ciencia cierta que a Chan le importa una mierda esto, Chan sería la primera persona en estar de acuerdo en que su padre es un bastardo corrupto y malvado. Pero por razones que no puedo comprender, Chan tiene una lealtad inquebrantable hacia su padre, aunque sabe que su padre sería el peor presidente que Corea del Sur haya conocido.

La lealtad a la sangre es profunda. Me alegro de no poder empatizar con tal desventaja.

—Déjame adivinar -hablo- Está proclamando en voz alta que tu padre no es apto para postularse para la presidencia y tu padre quiere que lo silencien.

—Hazlo en voz alta y se convertirá en un mártir -advierte Chan- El público no es estúpido. Si el tipo que cuestiona en voz alta la autoridad del Primer Ministro de repente aparece muerto, apuntará directamente a mi padre.  Reconocerán una dictadura inminente mucho antes de que suceda.

Levanto una ceja. 

—Entonces... ¿quieres que desaparezca?

—No, eso llamará la atención sobre él -dice Chan, se recuesta en su silla y respira hondo- Quiero que seas... creativo

Inclino la cabeza. No puedo negarlo, estoy intrigado Chan nunca antes me había dado tanta libertad. Sus órdenes suelen ser secuestrar a alguien o matarlo rápidamente, generalmente con la supervisión de Jisung o Changbin. Nunca se ha confiado en mí para hacer una de estas cosas, especialmente no solo y con la libertad de elegir mi método.

—Te enviaré el nombre y la dirección -promete Chan y señala con el dedo- Mátalo solo a él. Ese hombre tiene hijos y una esposa, no los toques y no dejes que te vean.

Con un asentimiento, giro sobre mis talones para irme. Justo cuando llego a la puerta, la voz de Chan me detiene en seco.

-Y Hyun Jin. Si haces otro truco como el que hiciste con Mogyul, acabaré contigo. ¿Entendido?

No me doy la vuelta, siento que se me hela la sangre y solo puedo asentir una vez antes de irme. Tan pronto como la puerta se cierra detrás de mí, me dirijo directamente a la cocina y miro hacia adentro. Tn está trabajando en el banco, cortando vegetales con Félix.

Ahora hay una parte lógica, muy, muy lógica en mi mente que sabe que se espera que haga esta misión solo. Entra, hazlo, sal. Sin fanfarria, sin ruido, sin testigos. Pero mientras me apoyo contra la pared para ver trabajar a Tn, mi mente se vuelve hacia la parte más ilógica de mi cabeza. La llena de malas ideas que cualquiera con cerebro reconocería como tal.

Entro en la cocina y sonrío cuando veo que los músculos de la espalda de Tn se ponen rígidos una vez que siente mi presencia. Bien. Esos son buenos instintos de supervivencia.

—Tn -digo, mi tono sorprendentemente casual cuando llego al banco y me inclino- Necesito tu mano con algo.

Félix parece curioso, pero Tn mantiene la mirada fija en las verduras.

Félix no está lo suficientemente cerca para escuchar, pero descubro a Tn murmurando por lo bajo. 

—Date una mano.

—No te preocupes -dice Félix, la buena naturaleza reaparece en el peor momento posible cuando toma el cuchillo de la mano de Tn- Me haré cargo aquí.

—Tomará un tiempo -advierto y Félix se encoge de hombros.

-De todos modos, es casi la hora de cerrar, no tenemos tantos clientes tan tarde en la noche.

Parece que Tn está a un segundo de lloriquear, pero asiente y me lanza una mirada cuando nadie más está mirando.

Con un pequeño suspiro, Tn toma su bolso y se quita el delantal.

-Vámonos entonces.