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Chan:

Mi conductor me lleva de regreso a God's Menu. En el camino, le envío un mensaje de texto a Félix para que se reúna conmigo allí y me responde con una: 'K'.

Con suerte, lo que sea que le pasa a Félix se puede solucionar con unas pocas palabras tranquilizadoras, tal vez una noche de cine. Félix requiere bastante poco mantenimiento cuando se trata de calmarlo.

El auto entra en la ciudad y, mientras lo hace, la radio está en volumen bajo, pero capto los anuncios de noticias.  Los asesinatos surgen por toda la ciudad, seguidos de una masacre en la Torre Jung.

Frunzo el ceño y reviso mi teléfono donde finalmente recibo mensaje tras mensaje de Changbin sobre lo sucedido.

Bin: Woo se está rompiendo.

Bin: Tengo las cintas de seguridad.

Bin: No va a durar.

Bin: Pero no saben que él lo hizo.

Tomo nota mental de reunirme con Changbin más tarde para descubrir qué pasó.

El auto se detiene en el estacionamiento casi vacío de God's Menu. Salgo del auto y recorro el restaurante hasta la parte trasera, donde soy recibido por una figura familiar parada cerca de mi oficina.

No Félix. 

Hyunjin.

Parpadeo sorprendido y me detengo frente a él.

-Hyunjin, ¿qué estás haciendo aquí?

El rostro de Hyunjin es completamente ilegible. Sus ojos de alguna manera son más oscuros de lo habitual, lleva una simple camisa blanca y pantalones negros y por un momento, solo mira fijamente.

Señalo la puerta de la oficina. 

-¿Querías hablar?

-Puedo hacerlo aquí -dice Hyunjin- Solo quería decirles que me voy de God's Menu. He pagado la deuda que tenía contigo cuando me absolviste de los cargos después de matar a mi padre, ya no hay nada que me retenga aquí.

Mi estómago cae, el aire sale de mis pulmones en una exhalación sorprendida y mis ojos se abren como platos.

-Espera... ¿tú qué?

-Me voy -continúa Hyunjin- Lo dejo.

-Pe... pero... ¡¿Tn?!

-Tn está más segura aquí por ahora, solo soy yo. Me voy y no hay nada que puedas hacer para detenerme.

Se da vuelta para irse, pero mi mundo ya está dando vueltas. No. No, no puede ser así. No cuando estamos tan cerca del final. No cuando la única razón por la que lo traje y lo protegí es porque es mi hermano pequeño.

Él y Félix son la única familia que me queda.

-Espera -espeto, extendiendo mi mano para agarrar el hombro de Hyunjin.

Toco algo y Hyunjin silba de dolor.  Intenta alejarse pero ya puedo ver algo debajo de la tela blanca de su camisa.  Sostengo a Hyunjin en su lugar con la otra mano y levanto la camisa para revelar la nueva marca en su piel. 

Feo, rojo y enojado.

En un momento vertiginoso, comprendo lo que ha hecho Hyunjin.

-Hyunjin…

-¡Quítate de encima! -Hyunjin gruñe, su hombro se escapa de mi alcance para poder empujarme. Hyunjin da unos pasos de precaución hacia atrás y me mira- La próxima vez que me toques, te romperé el brazo

𝐆𝐨𝐝'𝐬 𝐌𝐞𝐧𝐮 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora