𝐆𝐨𝐝'𝐬 𝐌𝐞𝐧𝐮

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Cuando me despierto en la cama de Hyunjin, lo primero que veo es el despertador justo al lado de mi lado de la cama. Números rojos y brillantes que muestran la hora temprana de la mañana.

A medida que mis sentidos regresan lentamente a mí, registro el calor de las mantas sobre mi cuerpo. El calor presionó mi espalda y una respiración lenta y constante contra la parte posterior de mi cuello donde Hyunjin está acurrucado contra mí, rodeándome con su brazo alrededor de mi cintura.

Habían tenido el día libre ayer.  Después del incidente de Woojin, no estaba en condiciones de trabajar y Hyunjin no me dejaba en paz. Nos fuimos a casa y tardé siete horas en hablar y cuando finalmente lo hice, fue solo para preguntar si Hyunjin tenía huevos para poder preparar el almuerzo.

No hablamos sobre Woojin o sobre el hecho de que me había ido más o menos mientras ordenaba a Chan y Hyunjin que lo enterraran vivo.  Hyunjin nunca preguntó tampoco, pero siguió observandome todo el tiempo, con los ojos en mí como si fuera una especie de depredadora impredecible que podría morder en cualquier momento. O un pájaro herido que necesitaba su atención constante.

Ahora aquí estamos desnudos en la cama porque Hyunjin había insistido en la ducha y no vimos el punto de usar ropa para dormir.

Los dedos de Hyunjin están calientes sobre mi estómago. Realmente no pienso en eso mientras siento suavemente los dedos de Hyunjin con las puntas de los mios. Tomo la piel tersa y suave, siguiendo hasta su muñeca y más arriba hasta su antebrazo sobre mi cintura. Cierro los ojos y simplemente... siento.

Está en silencio durante unos buenos diez minutos. Sólo el sonido de mi respiración y el paso ocasional de un coche muy por debajo del complejo de apartamentos. En esta paz, casi puedo convencerme a sí misma de que estámos completamente en otro lugar. En algún lugar más seguro.

-Has estado sintiendo mi brazo durante los últimos diez minutos -murmura Hyunjin adormilado, su voz un poco apagada con sus labios presionados contra la parte posterior de mi cuello- ¿Sientes las escamas?

Resoplo, bajo mi mano hacia la de Hyunjin y entrelazo nuestros dedos. 

-Aún no te has convertido en el diablo encarnado

-Joder, realmente me vendrían bien las alas

Me río esta vez, ahogo mi risa contra la almohada cuando siento que el brazo de Hyunjin se aprieta a mi alrededor mientras se despierta lentamente. Hyunjin se sienta lo suficiente para mirar el reloj sobre mi cabeza y gime cuando ve la hora.

-¿Qué diablos, Tn? -murmura, dejándose caer sobre la almohada- Vuelve a dormir.

-No puedo -confieso en voz baja- Tú duerme, yo me quedaré quieta

-No puedes dormir cuando estás consciente.

Hago una pausa, curiosa y giro la cabeza lo más que puedo en un intento de ver a Hyunjin. Apenas puedo ver un movimiento de su cabello rubio desde mi posición y Hyunjin está demasiado cerca para dejarme rodar sobre su espalda.

-¿en serio?

Hyunjin tararea afirmativamente y me abraza cerca de su pecho. 

-Si tienes algo en mente, sácalo para que podamos dormir

Lo pienso. Tengo muchas cosas en la cabeza, demasiadas para repasarlas en una noche, así que me conformo con lo más fácil.

-¿Cómo se involucraron los demás en God's Menu?

Hyunjin resopla. 

-¿Te preguntas cómo nos convertimos todos en caníbales asesinos?

Sí.