Daisy abrió lentamente los ojos y se encontró rodeada de rostros preocupados. Sus amigos, Jacqueline, Lisa, Dulce, Martha y Oliver, estaban todos allí, con los ojos llenos de preocupación.
Jacqueline, aliviada: Daisy, gracias a Dios que estás despierta. Estábamos tan preocupados por ti.
Daisy trató de incorporarse, pero le dolía la cabeza por el impacto de la pelota.
Daisy, aturdida: ¿Qué pasó?
Oliver: Te golpeó una pelota durante la clase de educación física. Estuviste fuera por un tiempo. Fue aterrador.
Cuando la niebla en su mente se disipó, Daisy recordó la conversación que tuvo con Dark mientras estaba inconsciente. No podía quitarse de encima la sensación de malestar que le había causado su alter ego. Daisy dudó por un momento, pero luego decidió que era mejor mantener la existencia de Dark en secreto, al menos por ahora.
Daisy a sus amigas, forzando una sonrisa: Estoy bien Solo un poco mareado. Gracias por estar aquí.
El grupo intercambió miradas, aún no del todo convencidos. Algo había cambiado en Daisy recientemente, y no podían identificarlo. Pero sabían que ella no se abriría a menos que estuviera lista.
Martha, con sinceridad: Estamos aquí para ti, Daisy. Si alguna vez necesitas hablar, recuerda que somos tus amigos.
Daisy asintió, agradecida por su apoyo. Sabía que todavía no podía confiarles lo de Dark. Era una carga que tenía que soportar sola, al menos hasta que encontrara la manera de separarse de ese lado oscuro de su personalidad.
Durante los siguientes días, Daisy hizo todo lo posible por actuar con normalidad con sus amigos. Continuó asistiendo a clases y saliendo con ellos, pero su mente estaba preocupada por el conocimiento que ahora poseía. Sabía que tenía que encontrar una manera de recuperar el control y evitar que Dark causara más daño.
Durante una de sus pausas para el almuerzo, Daisy decidió enfrentarse a Zara e Ivan. Necesitaba contarles sobre Dark y buscar su ayuda para encontrar una solución. Los encontró sentados en su lugar habitual, enfrascados en una conversación.
Daisy, con urgencia: Iván, Zara, ¿podemos hablar?
Zara levantó una ceja, sintiendo la seriedad en el tono de Daisy: Por supuesto, ¿qué pasa?
Daisy respiró hondo, tratando de estabilizarse.
Daisy: Descubrí algo mientras estaba inconsciente. Hay otro lado de mí, una personalidad más oscura, que he llamado Dark. Ella ha estado causando todas esas... cosas terribles que sucedieron.
Ivan y Zara intercambiaron miradas de preocupación, absorbiendo la información que Daisy acababa de compartir. Habían sospechado que algo andaba mal con ella, pero nunca imaginaron que fuera tan extremo.
Zara: Entonces, ¿estás diciendo que Dark es responsable de las muertes y el caos en la ciudad?
Daisy, con sus ojos llenos de arrepentimiento: No quiero participar en esto. Pero Dark... ella quiere mantener el control. Necesito tu ayuda para encontrar una manera de separarnos, para detenerla.
Sin dudarlo, Iván se acercó y tomó la mano de Daisy.
Iván: Estamos juntos en esto, Daisy. Encontraremos una manera.
Zara, con determinación: No dejaremos que Dark gane. Encontraremos una solución y te protegeremos, Daisy.
Daisy se sintió aliviada al saber que contaba con su apoyo. Con Iván y Zara a su lado, creía que podrían superar este obstáculo y finalmente poner fin a las fuerzas oscuras que amenazaban sus vidas.
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~Daisy~
RandomEra una chica común y corriente, hasta que unos recuerdos vienen hacia ella, y descrube quien es ella en realidad. Es mi primera historia que hago espero que les guste, lo siento por la mala ortografía o la narración. Ésto es la ante secuela de Las...