~Daisy~

Capitulo 102

Daisy, exhausta pero determinada, había pasado tres días inmersa en un riguroso entrenamiento. Daisy, finalmente, decidió tomar un breve descanso para recargar energías. Se sentó en una piedra en el centro del bosque, dejando que la brisa fresca y los sonidos naturales la envolvieran.

Al cabo de un rato, Daisy decidió seguir practicando. De repente, escuchó un fuerte ruido proveniente de detrás de un árbol. Curiosa, decidió investigar, pero justo en ese momento Dark hizo su aparición.

Daisy, irritada: ¿Aún no me has tenido suficiente, Dark? ¿Qué quieres ahora?

Dark, con malicia: Solo he venido a recordarte que puedo ofrecerte más que tus limitadas habilidades. ¿Acaso no te cansas de intentar ser alguien que no eres?

Daisy, cansada: ¿Qué estás intentando decir?

Dark, riendo: Quiero decir, ¿por qué no aceptas tu lado oscuro? ¿Por qué no aceptas que somos parte de una sola persona, que no podemos escapar de nuestro destino?

Daisy, irritada: Jajaja, dices lo mismo que él mejor cállate.

Dark, furiosa: Eso es lo que quiero que te enojes para que lo mates a él.

Daisy, desconcertada: ¿A quién?

Dark: ¿Qué, crees que no recuerdo lo que él hizo? El Rey Lowell, nuestro padre.

Daisy: No lo voy a hacer.

Dark, burlona: Oh vamos, no finjas que no lo recuerdas.

Daisy, furiosa: ¡No, no lo voy a hacer! Eso quedó en el pasado.

Dark: Igual el pasado te anda atormentando, no puedes olvidarlo y borrar eso recuerdos... ¡Yo puedo ayudarte a que ese pasado que te lastima no vuelva a atormentarte nunca más!

Daisy, negando: No.

Dark, frustrada: ¡Maldita seas, Daisy! ¡Debemos matarlo! ¡Tú lo has prometido! ¡Lo haz prometido a varias personas! ¡Tienes que cumplir tu promesa, Daisy! ¡Ahora!

Daisy, resuelta: No lo haré... Sí sigues así te voy a mandar al infierno, ¡no puedes controlarme! ¡Soy libre de hacer lo que quiera!

Dark: ¡Oh claro que puedo! ¡Solo te he dado tiempo para pensarlo, pero no esperes más tiempo porque me vuelvo a manifestar en tú cuerpo si no cumples tu promesa!

Daisy: Regresa otra vez en mi mente. ¡Déjame en paz!

Daisy se disponía a continuar su entrenamiento cuando escuchó a su hermano Noah llamándola desde un lugar no muy lejano.

Noah: ¡Hey, Daisy! ¡Ey! ¡Ya llegué, es hora de irnos!

Daisy, aliviada: ¡Bienvenido, Noah!

Daisy corrió hacia su hermano, feliz de volver a verlo.

Noah, preocupado: ¿Que pasó Daisy? Está escuchando que estabas gritando.

Daisy: No te preocupes no pasó nada. ¿Qué te trae por aquí?

Noah, emocionado: Me enteré de que estabas aquí entrenando, así que pensé en unirme a ti. Además, quería mostrarte algunas de las nuevas técnicas que aprendí durante mi entrenamiento con el Rey Leónidas.

Daisy, sonriendo: ¡Eso suena genial! Estoy ansiosa por ver tus habilidades en acción.

Noah: ¡Pues prepárate! ¡He mejorado bastante!

Después de la intensa conversación con Dark, Daisy se dispuso a entrenar junto a Noah. Ambos hermanos se encontraron en un claro del bosque, listos para poner a prueba sus habilidades.