Mientras tanto, en el hospital, Daisy espera ansiosamente la visita de sus amigos y familiares. Aunque está nerviosa por cómo reaccionarán ante su estado, está llena de gratitud por tenerlos a su lado en este momento crucial de su vida.
Finalmente, la puerta se abre y entran Noah, Iván y Zara. Daisy los mira con una mezcla de emociones, sintiendo un gran alivio al ver sus rostros familiares.
Noah se acerca a ella y le sonríe con ternura.
Noah: Daisy, estos son Iván y Zara. Vinieron a verte.
Daisy les devuelve la sonrisa, sintiéndose reconfortada por su presencia.
Daisy: Es un placer conocerlos, Iván, Zara. Gracias por venir.
Iván y Zara se acercan a su cama, expresando su alegría por verla despierta.
Iván: Nos alegra mucho verte consciente, Daisy. ¿Cómo te sientes?
Daisy asiente con gratitud, reconociendo el cariño en las palabras de Iván.
Daisy: Me siento mejor cada día. Los médicos dicen que mi recuperación será un proceso largo, pero estoy lista para enfrentarlo.
Zara le toma la mano con delicadeza, transmitiéndole su apoyo.
Zara: Estamos aquí para ti, Daisy. Si necesitas cualquier cosa, no dudes en decírnoslo.
Daisy asiente, sintiéndose profundamente conmovida por el afecto y la solidaridad de sus amigos.
Daisy: Gracias, de verdad. No sé qué habría hecho sin ustedes.
Noah interviene, recordando la conversación pendiente.
Noah: Daisy, hay algo más que necesitas saber. Jacqueline, tu prometida, también debería estar al tanto de tu situación.
Daisy asiente con comprensión, consciente del impacto que la noticia tendrá en Jacqueline.
Daisy: Entiendo. Deberíamos ser cuidadosos al informarle, especialmente considerando su estado.
Noah asiente, reconociendo la importancia de abordar la situación con sensibilidad.
Noah: Estoy de acuerdo. Podemos acompañarte para informarle sobre lo que ha pasado.
Daisy asiente, sintiéndose agradecida por tener a sus amigos a su lado durante este difícil momento.
Daisy: Gracias, chicos. Significa mucho para mí tenerlos aquí.
Después de que los demás se despiden y salen de la habitación, Daisy se queda a solas con Iván. Hay un momento de silencio tenso mientras se miran el uno al otro, ambos conscientes de la conversación difícil que está por venir.
Daisy rompe el silencio, buscando las palabras adecuadas para comenzar.
Daisy: Iván, hay algo que necesito contarte. Antes de la pelea en el palacio, hice algunas cosas de las que no estoy orgullosa.
Iván la mira con curiosidad y preocupación, esperando a que continúe.
Iván: ¿Qué cosas, Daisy? Puedes decírmelo.
Daisy respira hondo, recordando los eventos que ha hecho.
Daisy: Apuñale a mi padre con la espada y está en la sala de cuidados intensivos.
Iván: Daisy, eso es terrible. No puedo creer que hayas hecho eso.
Daisy, afligida: Lo sé. Y eso no es todo. También maté a mis propios abuelos.
Iván, sorprendido: ¿Tus propios abuelos?
Daisy asiente, luchando contra las lágrimas.
Daisy: Sí, no pude resistirme a la oportunidad de viajar en el tiempo, así que fui a ver a mis propios abuelos cuando gobernaban y mi padre era joven. Y cuando los maté a mis abuelos ya entendí porque mi padre me maltrataba debido al dolor que sentía cuando perdió sus propios padres y no lo pudia superar.
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~Daisy~
AléatoireEra una chica común y corriente, hasta que unos recuerdos vienen hacia ella, y descrube quien es ella en realidad. Es mi primera historia que hago espero que les guste, lo siento por la mala ortografía o la narración. Ésto es la ante secuela de Las...