Un fin de semana, Daisy decidió sorprender a su familia con una visita sorpresa. Llegó a su casa llevando una bolsa llena de víveres para preparar una cena especial juntos. Al ver a sus padres y a su hermano, el rostro de Daisy se iluminó con una sonrisa. Había extrañado su calor y su compañía.
Después de un cálido abrazo y un montón de besos, Daisy y su familia se reunieron en la cocina para preparar la cena. Mientras trabajaban juntos, compartieron historias y risas, creando recuerdos preciosos que guardarían para siempre.
Después de la cena, Daisy sacó su guitarra acústica y organizó una pequeña serenata para su familia. Sus melodías llenaron la habitación y todos se sumergieron en un cálido sentimiento de felicidad y amor. Daisy sabía que la música era su forma de expresar su amor y gratitud hacia su familia, y eso le llenaba el corazón de alegría.
Durante el resto del fin de semana, Daisy y su familia disfrutaron de actividades juntos. Salieron de paseo al parque, donde Gabriel mostró sus habilidades en el fútbol y Daisy le ayudó a perfeccionar sus tiros. También visitaron una exposición de arte local, donde Daisy se inspiró en las diferentes obras y adquirió nuevas ideas para sus propias creaciones.
Al día siguiente, Daisy y su familia decidieron pasar el día en la playa. Llenaron el maletero del coche con toallas, protector solar y una nevera llena de comida. Una vez en la playa, Daisy no podía contener su emoción mientras corría hacia el agua.
La familia se instaló en la arena y disfrutaron de la brisa marina y el sonido relajante de las olas. Daisy aprovechó la ocasión para enseñar a Gabriel a nadar. Se rió mientras lo sostenía en el agua y lo animaba a flotar. Gabriel se emocionó tanto que no paraba de chapotear y reír.
Después de un día lleno de diversión en la playa, regresaron a casa cansados pero con el corazón lleno. Daisy se sentía agradecida de tener una familia tan amorosa y comprensiva.
Decidió que debían guardar esos momentos especiales en un álbum de fotos familiar, así que todos se reunieron en la sala de estar y comenzaron a seleccionar las mejores fotos del fin de semana. Daisy imprimió las fotos y las pegaron en un hermoso álbum, agregando notas y recuerdos escritos a mano.
Cada vez que Daisy o su familia necesitaban una dosis de felicidad y amor, sacaban el álbum y pasaban un tiempo mirando las fotos y recordando esos hermosos momentos juntos. Era una forma de mantener viva la magia de aquel fin de semana especial.
Con el paso del tiempo, Daisy se dio cuenta de lo valioso que era el tiempo en familia. Aunque la vida a veces se volvía complicada y cada uno tenía sus propias responsabilidades, siempre encontraban tiempo para reunirse y disfrutar de momentos como aquel fin de semana especial. Eran esos momentos los que fortalecían los lazos familiares y creaban recuerdos duraderos.
Capitulo 63
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~Daisy~
De TodoEra una chica común y corriente, hasta que unos recuerdos vienen hacia ella, y descrube quien es ella en realidad. Es mi primera historia que hago espero que les guste, lo siento por la mala ortografía o la narración. Ésto es la ante secuela de Las...