BITCH || FREENBECKY

¿Qué?

FREEN

Provocar a Becky era lo mismo que ofrecer dulces a un niño para intentar sostenerla. Fue fácil. Ella intenta provocarme, pero terminó entregándose primero y cayó en la tentación más rápido.

Becky parecía un bebé asustado cuando me monté en su regazo y comencé a provocarla. No sabía dónde poner las manos y ni siquiera sabía qué hacer, si me miraba o miraba a la puerta. Esto solo me recordaba su primera vez en mi habitación. Sinceramente, fue el mejor momento que tuve en la cama con alguien.

:- ¿Tienes miedo de lo que puede pasar?- Susurré cerca de tu oído.

:- ¡No lo harás!- dijo con un hilo de voz

Le di una sonrisa traviesa y tiré de sus manos que estaban en mi cintura para tocar mis pechos sobre la blusa. Me miró sorprendida, tragó seco y arrugó la frente, haciéndome reír por su nerviosismo.

:- Son sólo pechos Becky- dije

Ella me miró desesperada. Poco después cerró los ojos, ya que había presionado más sus dedos contra mis pechos apretándolos. Ella miraba a todos lados menos a mí. Tiré mi cuerpo hacia adelante acostándolo sobre Becky y la hice mirar.

:- ¿Por qué estás haciendo esto? - Su voz falló junto con la respiración. Roce mis labios en su mejilla y bajé lentamente hasta su cuello. El olor de su perfume invadió mis fosas nasales, haciéndome inhalar ese fuerte olor femenino.

:- ¿Haciendo qué?- pregunté

Becky se mordió los labios y sostuvo un gemido cuando me moví sobre su intimidad. Yo también contuve mi gemido. Lo quiera o no, yo también me estaba excitando poco a poco. Ella podría ser inexperimentada o la vergüenza la detiene, pero si me atrapa bien, estaré totalmente entregada a ella por el simple hecho de haber mojado todas mis bragas por sentirla acariciarme. No puedo fracasar. No ahora.

Me encantaba mantener el control. Más aún cuando tienes a Becky debajo de ti, pero no podía ser tan obvia.

:- provocándome Becky

Reí pausadamente y me mordí los labios mientras la miraba. A Becky que estaba boquiabierta debajo de mí.

Comencé a repartir besos por la esquina de su boca mientras movía la cintura lentamente. Ahora sí, ella era más inteligente, ya que sus manos me apretaban los pechos mientras yo me frotaba sobre su sexo. Becky se estaba volviendo más encendida.

Me gustó eso.

:- ¡Muéstrame lo que sabes! - Susurré cerca de su boca que pedía con todas las letras para ser besada por la mía. Pasé mis uñas por su clavícula dejando una ligera marca rojiza. Becky había usado un pijama de correa delgada, por lo que era más fácil apreciar la curva de su cuello.

Le di un beso rápido en sus labios antes de comenzar a profundizar en nuestro beso, que era una delicia. Nuestras lenguas libraban una guerra entre algunos chupones y mordeduras. Ella bajaba los besos hasta mi barbilla dejando algunas mordeduras y sus manos ahora descontroladas, apretando mi cuerpo.

Su teléfono celular estaba vibrando sobre la mesa...

¡Maldita sea!

Me tiré al lado de la cama y Becky se levantó sentada en la punta. Me volví a poner el cabello en un moño y comencé a agitarme, mi cuerpo parecía arder.

:- Hola, Zendaya. - La volví a mirar y bufé. Miró hacia atrás  y comenzó a rascarse la cabeza.

Tenía que ser... ¿Esa idiota no duerme? Ya es de madrugada.