BITCH || FREENBECKY

Ops! Qué paso anoche, Becky?

FREEN

:- ¿QUÉ ESTOY HACIENDO AQUÍ? - Tiré bruscamente de la sábana para cubrir mi cuerpo. No estaba desnuda, solo en bragas y top. Mire a Becky, que se rascaba los ojos y trataba de entender.

:-Sam no grites son las 7 de la mañana, fuiste tu que viniste aquí. - Murmuró.

:- ¡Mentirosa! Tu trajiste y abusaste de mí. - . Se sentó a mi lado para mirarme y... ¿Reírse?.

¡¿Se estaba riendo de mi cara?!

:- ¿Abusar de ti? Mira bien mi cara y mira si quiero abusar de ti, Sam. Mis padres están aquí al lado, sería estúpido que hiciera algo así.

:- Pero ayer estaba con Nam bebiendo y... ¡No! - Puse las dos manos en la boca y abrí los ojos. - ¿Tuvimos sexo?

Becky se levantó y sujetó su cabello desordenados en una cola de caballo. Una desesperación comenzó a apoderarse de mí cuando me di cuenta de que ella solo llevaba bragas y sujetador también. Ni siquiera se molestó en mirarme, solo entró en el baño ignorándome por completo.

:- Becky, ¿puedes responderme? - Llamé a la puerta para que ella respondiera algo. La puerta se abrió y se detuvo con el cuerpo apoyado en la pared.

:- Lo único que responderé es que Dijiste que te gustaba. - Una sonrisa maliciosa apareció en sus labios y de nuevo vino mi desesperación

¿Cómo no recuerdo haberme ido a la cama con ella? ¿Qué me ha hecho? ¿Qué he dicho? Debo haber dicho tantas cosas que no debería.

¡Mierda!

:- ¿Te lo creíste? ¡Eso es mentira! Yo....Estaba borracha. ¡Nunca me gustarías! - Respondí tartamudeando. Becky era tan fría que estaba logrando ponerme nerviosa. No era la misma chica que siempre había estado en mi puerta con la excusa de querer hablarme. Ella me evitaba todo el tiempo. Parecía que habíamos cambiado los papeles, ella era tan intimadora y yo tan inocente e idiota.

:- Ni de mí ni de nadie.- dijo Pasó por mi lado, tomó una toalla colgada de la silla y me miró rápidamente.

:- ¡Así es! Me alegro de que lo sepas. No cometería ese error de que me guste nadie.-dije. Observé mi ropa en el suelo y comencé a recogerla para vestirme. Becky siguió de pie mirando lo que yo hacía. Tomé mi chaqueta que me puse ayer  y comencé a ponerme las zapatillas.

:- Me alegro de que me deshice de este problema. ¡Ahora me gusta alguien bueno y que no es una perra! - Respondió. Terminé de vestirme y me levanté en un golpe deteniéndome frente a ella. Escupía fuego por los ojos de tanto odio. Siempre haciendo estos comentarios innecesarios y siempre logrando golpearme.

:- La única perra aquí es tu novia, porque me garantizo y sé quién soy. Ella es una perra y envidiosa.

:- No hablas así de ella.- Me puso el dedo índice en la boca para evitar que siguiera hablando mal de su novia.

:- ¿Te duele? Dile a tu noviecita, que la próxima próxima vez, no solo le dejaré la boca herida, sino
la cara.- dije, Esa forma de Becky me estaba irritando. Todo por culpa de mi prima idiota.

:- Ella es tu prima, habla directamente con ella.

:- Eres su novia, así que dice lo. - Me di la vuelta en los talones y sentí que todo el mundo giraba en segundos. Respiré profundamente y comencé a bajar por la ventana. - Olvídate de que vine. ¡El alcohol me dejó mal de la cabeza!- Me quedé con las vigas de la pared blanca de madera y bajé con cuidado. A la mitad, decidí saltar al suelo. Estaba tan enojada que era capaz de golpearla. Me limpié las manos y comencé a caminar.