BITCH || FREENBECKY

Empapada

BECKY

Mi espalda se quemó sintiendo el golpe en la pared, Sam acababa de empujarme y salió apresuradamente desconcertada. No entendí mucho, solo la besé como todas las otras veces.

:- Sam! - Grité en un intento de hacer que se devolviera, pero sin posibilidad, ya estaba en el fondo. Me enredé los dedos en mi cabello rascando mi cuero cabelludo que ardía de tanto pensar en por qué.

Caminé lentamente hasta el final de ese túnel de cocotero que se encontró con el comienzo de la balada.

¿Se había ido?

:- ¿A dónde fuiste? - Jenna me tocó los hombros mientras intentaba ver mis ojos en medio de los cambios de luces.

:- Estaba con Sam.

:- ¿Otra vez detrás de ella? ¿No fuiste tú quien dijo que no iba a correr más?

:- No puedo, Jen. Cada vez es difícil mantenerme  alejada de ella.

:- Becky- Su cara era de aflicción y sus dedos me apretaban los hombros. Quizás sabiendo lo que sufriría a partir de ahora con esta mujer. Solté un suspiro y arregué los hilos de mi cabello desordenado, mi cabeza palpitante, no por el alcohol, sino por maquinar tanto sobre esa mujer.

Complicado, lo sé, pero era la mujer más hermosa de esta fiesta. Me estaba enamorando de Sam y con eso, se convierte en el miedo, el dolor, los celos, el amor demasiado. Me gustó Rudy, pero enamorarme, nunca. Sam estaba siendo la primera. Gran comienzo.

"¡Hey Hente, atención aquí! Convencí a mi amiga de mucho tiempo para que hiciera un baile para nosotros. Se sorprenderán con tanta belleza, espero que les guste."

Un tipo con un topeto enorme habló en un escenario un poco improvisado. Algunos hombres comenzaron a sentarse donde se presentaría esta mujer. Traté de deshacerme de tanta gente que comenzó a caminar por delante del pequeño escenario.

Jenna me tiró de las manos con la intención de alejarse de esa cantidad de gente gritando al escuchar el ritmo de la música empezar a sonar. El sonido de la música sonó en mis oídos, haciéndome girar hacia las luces apagadas. Era una de mis canciones favoritas de Beyonce. La mujer tenía buen gusto.

Una luz roja se detuvo en el centro iluminando un cuerpo esculpido por Dioses y semidioses. La mujer llevaba un tipo de falda gladiadora, pero las plumas caídas eran corbatas y un top de cuero. En su rostro tenía una máscara blanca y detrás enormes cabellos negros.

Me mordí los labios y contuve la respiración cuando comenzó a subir al poste lentamente mientras rodaba. Eso era para quitarle el aire a cualquiera. En un giro ya estaba en el suelo gateando cerca el escenario, de una manera tan sexy que si yo fuera el chico de enfrente, ya me habría derretido.

Comenzó a rodar lanzando la cabeza hacia atrás y abriendo un poco la boca. Confieso que pensé que era una mierda al ver esa escena, aunque no supiera quién era, era extremadamente emocionante.

:- ¡Necesito aire! Qué cuerpo tan maravilloso. - Jenna habló un poco más cerca de mi oído. Ese ritmo era tan fuerte que temblaba las paredes. Mi corazón saltaba por la música alta y por ser la música de mi cantante favorita.

:- ¡Ella baila bien! - Hablé, pero no quitaba los ojos del escenario. Ella hacía lo imposible en ese trozo de hierro y dejaba a cualquier mujer con envidia y a cualquier hombre excitado, con la excepción de algunas mujeres, como yo.

Todos empezaron a gritar y a pedir que se quitara la ropa. Hombres.......

Se dio la vuelta llamando a alguien por el dedo. Un chico totalmente emborrachado subió al escenario, se aseguró de alborotar a la audiencia y comenzó a bailar con ella súper agarrada. De todas las formas intentaba tocar su cuerpo o incluso pasar sus manos en la intimidad de la chica.