Debía huir y asegurarme de que no me vieran, no quería llamar la atención de nadie así que me escabullí, pero para mí mala suerte, los mismo que me jodieron el día anteriormente estaban en la entrada del instituto como estuviesen esperándome.
"La biblioteca"
Al final me terminé escondiendo en la biblioteca de la escuela. Es enorme y espaciosa, pero sobre todo silenciosa y la amo. Observo a mi alrededor y voy directamente hacia la sección de novelas literarias, me fue difícil encontrarlas porque no había nadie para preguntar.
Uno llamó mi atención y se encontraba en la parte mas alta de los estantes, ni siquiera intentando podría alcanzarlo porque soy una enana. Si, un nomo de 1.56 de altura. Busco las escaleras por todas partes para poder subir y obtenerlo.
Sonrío al tenerlo en mis manos, pero me moví bruscamente de la felicidad al leer el título haciendo que la escalera se tambaleara, me aferro a ella para controlarla, pero termino haciendo lo contrario y la arrastré hacia mí.
Suelto un grito aterrador porque la caída seria fatal para mí.
-¡Oh! Vaya. -abro mis ojos y me encuentro con el par de esmeraldas que amo demasiado. -Fue una suerte que llegara a tiempo.
Su cuerpo fornido y atlético me sostiene en sus brazos mientras esa sonrisa perturbadora se encontraba en su rostro adornándolo. Trago. Me cuesta hacerlo. Me baja de sus brazos como todo un caballero.
-Deberías de tener mas cuidado pecas. Esa caída pudo ser mortal para ti si no hubiera llegado yo.
-Gracias. -mascullo algo audible -Otra vez.
-¿No deberías estar en clase?.
-¿Y tú también no?
-Solo vine por un encargo del profesor.
-Ah. -suelto sin más.
Como le digo que estoy aquí por aquellos chicos.
-¿Me ayudas? No podré con dos cajas solo.
Sonrío ampliamente y le digo que sí.
A pocos metros de la entrada los veo otra vez y claro que se dieron cuenta de nosotros porque nos miraban y no muy felices que digamos. Una de las chicas lo saluda y lo toma del brazo al acercarnos a ellos mientras que el tipejo que quiso humillarme intenta ganarse su confianza al invitarlo a unirse al equipo de futbol.
Les sonríe, pero esta vez es diferente a la sonrisa amable que me dio a mi, es una sonrisa que se ve perfectamente escalofriante pero que claramente dice que no tiene nada de que tratar con ellos y que solo le estorban, pero no se dan cuenta y yo si.
-Pecas, vamos.
-¡Piénsalo, estaremos esperándote amigo! -grita a todo pulmón para que lo escuche.
Lo sigo detrás y al ver a los otros desde mi hombro noto que Clark me guiña el ojo derecho con maldad. Debe estar esperándome porque lleva en ese mismo lugar varios días desde el incidente y me molesta porque he faltado a varias clases por su culpa.
Lo ayudé hasta llegar a su salón así que me despedí, pero al encaminarme a mi salón él me dijo que esperara. Claro como soy tonta y quiero estar con él, lo esperé. Me acompañó a mi salón de clases y no pude ocultar mi felicidad, era como si fuéramos una pareja en la que su novio se asegura de proteger a su chica.
-Joven Collins. -el profesor sale y se sorprende de verlo conmigo. -¿Qué hace aquí?
Él se disculpa y le dice la razón por la que me demoré y el profesor aceptó su excusa perdonándome por llegar tarde.
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Linajes
VampireEs extraño pero apuesto. Sus ojos color esmeralda te atrapan y te envuelven en la oscuridad que esconde detrás de una sonrisa cálidamente fria. ¿Esconde algo? Si. Pero Sandy se da cuenta que es la única en el pueblo de Hollow City que no sabe quien...