Yo, definitivamente no iba a cambiar mi aspecto. Lo de antes fue una bandera roja para que no vuelva a ocurrir. Bastián me aseguró de que no volvería a pasar, aun así, no quiero arriesgarme y él apoyó mi decisión; según él así nadie me pondrá los ojos encima.
Nuevamente los chicos continuaron faltando a clases después de que me quedé una noche en su casa. Claro que me mantengo en comunicación con los tres, pero la única que parece responder seguido casi todos los días es Adara. Aine y Bastián se encontraban distantes por ahora, sé que él trata de responderme lo más rápido que puede, pero según Adara, él se esta encargando de algunos asuntos de su padre en su ausencia. Él señor Dominick no estaba así que el como el mayor de los hermanos y futuro heredero debe encargarse de todo, y eso incluye las continuas muertes de personas en los bosques.
Cuando no se presentan a clases, debo llevar apuntes para que no se retrasen y siempre espero verlo y aunque lo logro, pero es brevemente. Hoy iría nuevamente.
—¿Sandy? —mi hermana asoma su cabeza por la entrada de la sala —¿A dónde vas a estas horas?
Mi hermana al fin tenía descanso después de trabajar sin descanso para pagar su pago adelantado. Y había olvidado que se encontraba en casa.
—Voy a casa de los Collins. —me pongo mis tenis con torpeza —Volveré antes de las diez.
—No iras a ninguna parte.
Freno en seco. La miro confundida y luego me rio por su mala broma.
—Buena broma. —suspiro —Me voy.
—Dije que no. —ella sale y me toma de la mano —No vas a ir a ninguna parte.
—Keith. ¿enserio planeas tomarte el papel de la hermana estricta ahora?. Déjame decirte que no te queda ni un tantito. —ella no me deja ir —¿Es enserio esto?
—No saldrás de esta casa y punto. —su seriedad me abruma
—Estas loca —dije molesta
—Llamame loca, pero no vas a ir y es mi ultima palabra. —sentencia —No dejaré que mi pequeña hermana vaya por ahí con esos asesinos aun sueltos cazando a chicas como tú.
—¿De que hablas?
—Sabes muy bien de lo que hablo. Todos hablan de los asesinatos continuos en Hollow City. Y por ello habrá toque de queda para todos los ciudadanos, nadie podrá salir de casa a partir de las 7:00 pm hasta encontrar al asesino.
—Pero Keith...
—Pero nada Sandy. —dijo con severidad —Prepararé la cena. Ni siquiera pienses en salir porque si lo haces, te juro que te encadenaré de un pie.
Abro mi boca petrificada. Quise objetar, pero ella me dejo sola con mi coraje. Le saco la lengua y subo encerrándome en mi habitación. No puedo creer que me haga esto justo cuando hoy él se encuentra en su casa.
Dejo mis cosas en una esquina y me tiro sobre mi cama, viendo el techo escucho mi propia respiración, y el silencio que me rodea hasta que se irrumpe pero la notificación de mi celular, lo tomo y me siento sobre mi lugar rápidamente al ver el nombre del remitente.
"No salgas de casa, es peligroso para las chicas como tú"
Inclino mi cabeza un poco tratando de pensar en lo que quiso decir con como las chicas como yo así que le pregunté.
"Vírgenes"
Mi cara se calentó al leer su respuesta directa.
—Pero que le pasa. No pudo ser más discreto al responderme.
"Pero así es él, Bastián siempre es directo al decir las cosas"
Aun así, me afectó su mensaje y le respondí con un "Bien." Esperé su respuesta, pero jamás llegó haciéndome ver que fui demasiado cortante con él y probablemente se enfadó conmigo.
Después de cenar una comida deliciosa que mi hermana encontró por internet llamada "Baleadas". Nos quedamos viendo tele un rato, las noticias claro está porque a mi hermana le encanta verlos y si no es la noticias, son documentales de animales o de asesinatos.
Como siempre hablan del cuerpo de las chicas que fueron encontradas calcinadas en los bosques de Hollow City y hasta ahora, todo indica que fue como si las hubieran quemado en la hoguera como si fueran brujas.
—Ay dios...
Mi hermana se asusta al mencionar que hay otra chica desaparecida. No me llama la atención ni un poco, pero al pasar la imagen de la desaparecida me congelo. La reconocí de inmediato porque era la misma chica con la que hablé en la fogata. Al parecer se llama Greyci.
—Es ella —dije en voz alta sin creerlo
—¿Quién?
—La chica que fue amable conmigo en la fogatada.
Mi hermana mira su foto en la pantalla y dice que es una pena que sus padres la descuidaran, pero seguramente estaría muerta como las otras. Preocupada le marco a mis amigas, pero no responden así que le llamé a él y tampoco respondió. Mantenía comunicación con esa chica, pero no mucha, me dio su número, pero nunca me dio su nombre así que la registré como chica del café.
No podía dormir, daba vueltas en mi cama de un lado a otro pensando en Greyci. Bastián no me responde para hacerle saber que la chica de uno de sus amigos estaba desaparecida.
"Aunque seguramente ya lo sabe"
Metida en mis pensamientos pensando en si deba insistir, tomé el celular nuevamente y le marqué a Bastián, suena y suena, pero no responde. Unos fuertes golpes me hacen brincar del susto, no quería bajar, pero los gritos de una voz que me era familiar me hizo correr enseguida.
Helada, observo a Greyci gravemente herida.
—S–Sandy... —cae sobre mi —Ayúdame...
Mis ojos se mueven de un lado a otro pero me congelo cuando medito bien lo que acaba de decir. Yo no conocía su nombre y ella tampoco el mía y por eso me decía pecas.
—¿Cómo supiste mi nombre?
No se mueve, pero su risa siniestra me hizo alejarme de ella. Con horror veo que ya no era Greyci la que estaba frente a mí. Era otra mujer. Se burla mientras su cara cambia por completo.
—Supongo que fue un error de mi parte no investigar mas a fondo la amistad de ambas. Llévatela.
La piel se me eriza antes de que pudiera ver a mis espaldas, ni siquiera pude verlo, simplemente mi cuerpo se desvaneció al sentir un dulce aroma a fresas silvestres. Al abrir mis ojos por unos sollozos, me desperté alterada, veo los barrotes oxidados frente a mi, quise ponerme de pie y sentí que unas cadenas en mis manos me lo impidieron.
Busco a la dueña del llanto y me sorprendo al ver a Greyci a mi lado. Al llamarla por su nombre ella levantó su cabeza, al verme me sentí aliviada de saber que aun seguía con vida. Me abraza sin dejar de llorar.
—Te ví en las noticias. Me alegra saber que estas bien.
—Quiero... volver a casa.
Me limito a sonreírle porque no puedo decirle que saldremos de aquí ya que soy una humana como ella, no puedo hacer nada en mi situación. Hasta ahora ni siquiera Bastián ha podido encontrarla. Pero encontraré la forma de salir de aquí antes de que quieran matarme.
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Linajes
VampirosEs extraño pero apuesto. Sus ojos color esmeralda te atrapan y te envuelven en la oscuridad que esconde detrás de una sonrisa cálidamente fria. ¿Esconde algo? Si. Pero Sandy se da cuenta que es la única en el pueblo de Hollow City que no sabe quien...